Un domingo de estos me tocaba ir a Alajuela para cumplir un fondo –un entrenamiento de larga distancia– en preparación para la mediamaratón de Correcaminos, próxima a realizarse.
Teníamos que hacer 19 kilómetros, por lo que había que ir temprano, para evitar problemas en la piel causados por el sol y también para esquivar la deshidratación. Por eso entre más temprano, mejor.
A las 5:30 a.m. aproximadamente llegó el bus de Tuasa a la parada frente a la Universidad Nacional (Heredia), una unidad que parecía para turistas y no el tradicional modelo que pasa por esa ruta. Y para completar la sorpresa, tenía servicio de Internet wifi.
Al fin iba a probar como se siente estar con wifi en el bus, pues ninguna de las líneas de Heredia lo tienen. El servicio está también disponible en la ruta de San Isidro de Heredia a San José, que va por la pista de Guápiles. También en el servicio a Cartago, que brinda Lumaca.
El bus se iba deslizando sin problemas, pues no había presas. Eso y el wifi hacían de este viaje extraño, ¿no?
Las redes inalámbricas locales con wifi son una buena alternativa para descongestionar los servicios de datos móviles de los operadores. En varios países, las compañías celulares han combinado y complementado sus redes celulares con conexiones wifi para asegurar el servicio a sus clientes.
En Costa Rica un operador y la compañía Subete expandirán el servicio a 7 o 10 rutas para brindarlo en 450 unidades. ¡Esperamos que así sea!
El servicio en Tuasa lo brinda otra firma, que es la que aparece cuando uno empieza usar el servicio.
Para conectarse a la red wifi hay unas calcamonías en las ventanas que dan las instrucciones. Es tan fácil como siempre lo ha sido conectar a este tipo de redes locales inalámbricas.
Rápidamente el smartphone la detectó. Luego había que aceptar las condiciones del servicio (por supuesto, como todo buen usuario no las leí) y empezó la cuenta regresiva: 10, 9, 8,... 3, 2 y 1.
Estaba conectado y podía usar el servicio.
Revisé redes sociales, publiqué algo en Twitter alusivo a la falta de presas y la conexión wifi (tenía mucho entusiasmo de ambos sueños hechos realidad, aunque fuera por un instante) y le realicé una prueba de velocidad con la aplicación de SpeedTest.
Para tener una comparación me desconecté del wifi y le hice la prueba de velocidad a la conexión del operador telefónico.
Los resultados los puede ver Usted en las fotos que acompañan este post.
Como puede ver en la conexión wifi duró varios milisegundos más en conectarse (es lo que se indica como PIN): 128 ms de la red wifi del bus contra 35 ms de la red de datos del operador móvil.
La velocidad para descargar datos de la red wifi del bus es similar a la de la red móvil, pero si quiero subir datos (una foto, enviar un correo, o lo que sea) la red móvil sería más rápida.
Claro que a esa hora no debíamos ser muchos los usuarios pegados a una u otra red.
El único problema fue cuando intenté conectarme a la wifi del bus de nuevo (con la idea de no gastar datos móviles comprados en prepago al operador). En primera instancia no se pudo. Luego se conectó, pero la señal se cayó. Y, despúes, no lo logré más.
¿Cuál ha sido su experiencia con las redes wifi en los buses?