La riqueza de las naciones

Uber, libertad y democracia

La solución definitiva en cuanto a Uber, no es regularlo sino liberar el servicio de taxis derogando las leyes 7.969 y 8.955.

EscucharEscuchar

Uno de los graves errores en política es creer y respaldar la idea de que la función del gobierno es proteger a los grupos de presión. La gente olvida que cuando el gobierno protege a un sector, inevitablemente debe castigar al pueblo porque la protección nunca es gratis. Las consecuencias de esta práctica son: precios más altos, menos inversión, menos empleo, menor calidad en el servicio y peor distribución de la riqueza. En el caso de Uber, la protección al gremio de los taxistas rojos (aquellos que operan con licencia otorgada por el gobierno) no solo ha traído consecuencias económicas negativas, sino también situaciones sociales perversas al promover el odio, la violencia con el daño a la propiedad privada y la integridad física.








En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.