Actualmente es común escuchar hablar de los “organismos genéticamente modificados (OGM)”, (conocidos como “transgénicos”) y sus implicaciones positivas y negativas para la salud humana, hoy abordaré esta temática para comentarles sobre los alimentos que consumimos y que provienen de estos organismos basada en mi conocimiento.
Según la Organización Mundial de la Salud, los OGM son aquellos a los cuales les han modificado su material genético (ADN) para mejorar sus características de modo artificial; dentro de los organismos genéticamente modificados encontramos los alimentos transgénicos.
Los alimentos transgénicos son aquellos que provienen de OGM y van ligados a mejorar la productividad de los productos con un menor precio y mayores beneficios, por ejemplo, un alimento se puede modificar genéticamente para aumentar su valor nutricional. En cuanto a alimentos transgénicos en Costa Rica desde 1990 podemos encontrar maíz, soya, trigo, tomates y arroz.
Puntualmente para el maíz, con la modificación genética se busca sea más resistente a insectos, la soya resistente a los herbicidas, el trigo a los insectos, plagas y sequías mientras que los tomates se modifican para que su vida útil una vez dada su cosecha tenga mayor prolongación. En cuanto al arroz transgénico, el mismo busca desarrollar un aumento del contenido de vitamina A en el producto.
Los alimentos genéticamente modificados que se ofrecen al consumidor han sido avalados por el mercado internacional y no tienen probabilidad de presentar riesgos a la salud humana. El Programa de Inocuidad Alimentaria de la Organización Mundial de la Salud tiene entre sus objetivos identificar los alimentos que deben someterse a evaluaciones de riesgos y acá se contemplan los alimentos genéticamente modificados.
Según la OMS uno de los objetivos del Programa de Inocuidad Alimentaria es colaborar con las autoridades nacionales en la identificación de los alimentos que deben someterse a evaluaciones de riesgos, incluyendo alimentos GM, y recomendar las evaluaciones correctas.
El proceso para la liberación de un nuevo OGM requiere amplia investigación y una serie de etapas rigurosas para garantizar la seguridad de su uso y consumo a la población.
La forma en que se da la reglamentación de los alimentos genéticamente modificados en los países es variada. Las legislaciones de estos alimentos se concentran en evaluar los riesgos en la salud de los consumidores así como el control y comercio de estos en el mercado; todos los productos que se encuentran a nivel internacional han pasado estas evaluaciones.
Ahora bien, hemos comentado los beneficios de estos alimentos, pero es importante mencionar su contraparte que implica riesgos para la salud como lo son y menciona la Organización Mundial de la Salud:
- Efectos directos sobre la salud (Toxicidad).
- Tendencias para provocar una reacción alérgica.
- Algunos transgénicos pueden transferir a las bacterias la resistencia a determinados antibióticos que se utilizan para luchar contra enfermedades.
- Aparición de nuevas sustancias tóxicas en los alimentos.
A pesar de los cuestionamientos que surgen respecto al consumo de estos alimentos cabe rescatar que tanto los beneficios de estos como sus desventajas son importantes de ser tomados en cuenta ya que el principal propósito es mantener un adecuado control de la alimentación.
Sin duda alguna, en nuestro consumo diario de productos procesados estamos incluyendo los llamados “alimentos transgénicos”, hay una fuerte discusión entre los que están de acuerdo o no en su consumo, lo más importante es que se informe de diversas fuentes.