El vino australiano gusta cada vez más. Las exportaciones aumentaron en general un 14% en 2015, y un 66% hacia China, rendida a los pies del buen hacer vinícola de Australia, el quinto exportador mundial.
Australia exportó vino por $1.470 millones el año pasado, según cifras de Wine Australia.
Los quince principales mercados de exportación de Australia van viento en popa. Estados Unidos se lleva la palma en importe con $443 millones (+4%), seguido del Reino Unido (+0,2%). Pero donde se dispara realmente el crecimiento es en Asia.
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China es el tercer importador de vinos australianos , con un importe de $370 millones de dólares (+66%), y Hong Kong, su quinto cliente ($132 millones de dólares, +22%).
"Si juntamos los dos, China y Hong Kong superan por primera vez a Estados Unidos", recalcó Stuart Barclay, director de marketing en Wine Australia.
En otros países asiáticos, como Malasia (+56%), el crecimiento es espectacular. La caída de la moneda australiana lo explica en parte. "Comprar vino australiano se ha vuelto mucho más asequible para estos mercados", explicó Barclay.
El sector se beneficia de los acuerdos de libre comercio firmados por Australia con varios países asiáticos, y el más importante de todos, el de China, entró en vigor a finales de 2015.
"Marcará una gran diferencia: los impuestos, que empezaron a bajar, eran de en torno al 16% y desaparecerán de aquí a cuatro años", afirma Jeff Burch, presidente de Howard Park Wines, cuyos viñedos se encuentran en Australia Occidental.
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Incluso antes de su entrada en vigor, el acuerdo ya había contribuido al crecimiento récord de las ventas de vino a China, explicó Jeff Burch.
"Ha suscitado interés. La gente pensó 'el vino australiano va a ser más barato, echemos una ojeada'. Hay que seducir a la clase media que se occidentaliza cada vez más y muestra interés por el vino", acotó Burch.
Junto con su equipo, Jeff Burch va unas cinco veces al año a China. Abrió una oficina en Pekín, gestionada por chinos. Invita a sus viñedos a distribuidores y vendedores para que entiendan mejor el vino. "Los turistas VIP vienen por dos o tres días", añadió.
En Australia, las regiones vitícolas intentan atraer a turistas. "Cuando regresan a China compran vino australiano", afirmó Stuart Barclay. En 2015, más de un millón de chinos veranearon en Australia.
La ralentización del crecimiento chino no preocupa a Jeff Burch: "Los chinos son cada vez más ricos y quieren probar lo mejor de todo. El vino forma parte de lo mejor".