Aunque la cantidad de empleados crece en América Latina, el incremento en la cantidad de mano de obra entre los sectores de mayor y menor productividad no es equitativa, pues los más productivos son los que absorben menos empleados. Así lo señaló el Estado de la Nación y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El estrato de alta productividad está compuesto por actividades de exportación y empresas de gran escala operativa; genera el 66,9% del producto interno bruto (PIB), pero solo un 19,8% del empleo, de acuerdo con el Estado de la Nación.
Le sigue el estrato de productividad media, que corresponde a actividades de lento crecimiento que tiene escasos vínculos con los sectores de alta productividad; aporta un 22,5% del producto y emplea al 30% de la fuerza laboral.
Por útlimo, el estrato de baja productividad está conformado por el sector informal; aporta el 10,6% pero concentra el 50,2% del empleo.
Mauricio Dierckxsens, especialista de empleo de la OIT, comentó que esto refleja la ausencia de políticas sectoriales. "Es necesario identificar cuáles son los sectores que están creciendo y apoyarlos con capacitación y establecimiento de mercados. Pero también hay que saber cuando dejar de apostar por un sector que ya llegó a su límite", expresó.
Por ejemplo, los datos del Estado de la Nación revelan que en los empleos de la "nueva economía" (servicios, zonas francas y agrícola no tradicional) y de los "servicios de apoyo" el ingreso promedio de los ocupados aumentó en términos reales un 5,4% y un 4,2% respectivamente en el lapso 2010-2011, mientras que en la "vieja economía" se registró un descenso del 2,3%, lo que provocó una ampliación en la brecha de los ingresos.