Las exportaciones, así como las importaciones, del país se contrajeron desde el año pasado y se prevé que sigan por ese camino el resto del 2014 y durante el 2015.
Así se desprende del Estudio Económico de América Latina y el Caribe de la Cepal, presentado la semana pasada en Santiago de Chile.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) atribuye este panorama al alto costo de la energía eléctrica, las variaciones del tipo de cambio y el precio de las materias primas.
Los tres temas han formado parte de la agenda del sector productivo que requiere atención del Gobierno para lograr mayor competitividad.
El comercio de bienes mostró poco dinamismo en Costa Rica durante el 2013, pues solo aumentó un 1,2%, lo que se considera la expansión más baja de los años posteriores a la crisis económica global del 2009.
Por su parte, las importaciones de bienes, aunque crecieron en un 2,4% en el 2013, mantuvieron la tendencia a la desaceleración porque el crecimiento en el 2012 había sido de 8,4%.
“En el sector externo, se pronostica una desaceleración de las exportaciones en 2014. Asimismo, se espera una desaceleración del crecimiento de las importaciones”, indica el estudio.
La Cepal confirma que el anuncio del cierre de las operaciones de la fábrica de microprocesadores de Intel, para finales del 2014, causará un fuerte impacto en las exportaciones sobre todo en el 2015.
Según la Comisión, la salida de Intel tendría repercusiones importantes en la economía de Costa Rica, no solo en las exportaciones, que son su punto fuerte (los microprocesadores aportan alrededor del 20% de las exportaciones totales), sino también en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para fines de este año y el próximo.
La presidenta de la Cámara de Exportadores (Cadexco), Mónica Segnini dijo que ante la contracción económica, el país está obligado a un análisis de la estructura productiva del país y a partir de ahí crear una estrategia para compensar el golpe.
“Necesitamos tener claridad sobre cuáles son las verdaderas potencialidades. De lo que tenemos, cómo aprovecharlo y de lo que no tenemos cómo agregar mayor valor, diversificar y no depender de un solo producto”, comentó..
El presidente de la Cámara de Agricultura, Juan Rafael Lizano coincide en que hay que apostar por lo nacional abriendo el crédito y soltar la inflación.
“El rédito ha estado muy restringido. Estamos defendiendo la inflación y sacrificando el crecimiento económico. Hay que aumentar la oferta crediticia para reactivar la economía”, añadió.
Afectación es pareja
La caída en las exportaciones se refleja tanto en los productos tradicionales como en las zonas francas.
En el caso de los primeros, la disminución en el 2013 fue del 6% y el mayor golpe se recibió en el café con una baja del 26,8%.
La baja en los precios internacionales y la afectación por la roya fueron las principales causas.
En las zonas francas aunque se expandieron en 4,9% por el dinamismo de las partes de circuitos modulares, ese crecimiento fue del 5,9% muy inferior al 18,6% registrado en el 2012.
Donde se mostró un pequeño respiro en las exportaciones del 2013 fue en los productos no tradicionales que crecieron un 2,1%, principalmente por el aumento de los productos agropecuarios y marinos, como la piña, los camarones y el pescado.
En los tradicionales, fue el azúcar el que se expandió un 4,3%.
Según Cepal, en los primeros meses de 2014, el desempeño del comercio de bienes ha seguido siendo decepcionante.
Las exportaciones cayeron un 0,7% acumulado hasta abril, mientras que las importaciones cayeron un 0,2% durante el mismo período.