Comida que le cae mal constantemente, gastritis, acidez, náuseas, dolor abdominal, inflamación y estreñimiento ¿se ha preguntando por qué las molestias digestivas son recurrentes cuando se manejan altos niveles de estrés?
La respuesta parece ser muy sencilla; ante una situación estresante el cuerpo libera adrenalina y cortisol –uno de los efectos de esta última sustancia es apagar o inhibir el sistema inmunológico–.
La presencia de ambas hormonas provoca reacciones en el organismo, entre ellas aceleración del pulso, ausencia de apetito, agruras, náuseas y dolores de estómago.
Súmele a ello la dificultad para asimilar los nutrientes como consecuencia de las diversas inflamaciones en el sistema digestivo. El mensaje no puede ser más claro: se trata de un sistema que requiere de especial atención.
Detalle digestivo
Al enfrentar situaciones de estrés, es frecuente que las defensas naturales del organismo decaigan y la persona se vuelva más susceptible a infecciones.
Sentir molestias digestivas o percibir que la comida “cae mal”, son dos quejas recurrentes entre personas estresadas.
“Eso se produce porque existe un estado de irritabilidad que hace que el tracto gastrointestinal sea más “sensible” a estímulos que normalmente no son tan molestos ni dolorosos”, explica Luis Daniel Quesada, especialista en gastroenterología y endoscopia digestiva.
El estrés altera, además, el procesamiento de estímulos en el cerebro y como consecuencia la persona está más propensa a magnificarlos y a interpretarlos como dolorosos o molestos.
“La función de motilidad del tubo digestivo se hace más lenta o más rápida –dependiendo de la persona– y causa dolor y diarrea, o por el contrario llenura, distensión y estreñimiento”, especifica Quesada.
Cuidados especiales
Una de las principales sugerencias consiste en proteger el tracto digestivo, pues el 70% de las defensas naturales del cuerpo se encuentran en esa área. Siendo este porcentaje tan alto, bien valdría la pena dedicarle tiempo.
La primera recomendación es el consumo de probióticos, pues se trata de microorganismos vivos que al ser administrados en cantidades adecuadas confieren un beneficio para la salud del huésped, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los probióticos mejoran el sistema inmune y son buenos para un mejor balance y salud de la flora intestinal, además previenen enfermedades y patologías asociadas al tracto gastrointestinal, según explicó la nutricionista Karla Barrenechea.
Los puede encontrar en yogur con probióticos, algunas leches fermentadas o quesos. También pueden adquirirlos para hacerlos y prepararlos en casa.
Consumir alimentos altos en fibra y en antioxidantes y mantener una dieta balanceada y saludable, son un buen complemento para la salud digestiva.