Un ejemplar de la flor más grande del mundo, conocida como flor cadáver, empezó a florecer el domingo en el Jardín Botánico Nacional de Bélgica, un hecho muy poco frecuente que se produce de manera inesperada por tercera vez en cinco años en las afueras de Bruselas.
Esta espectacular flor, que suele florecer tres o cuatro veces a lo largo de los 40 años de vida, también se conoce como aro gigante o bunga bangkai (del indonesio, flor cadáver o flor fétida) por el olor a carne podrida que desprende para atraer a los insectos polinizadores, los coleópteros, que garantizan su reproducción.
Sin embargo, la planta del jardín de Meise floreció en 2008, el año en que llegó de Bonn, Alemania, en 2011 y otra vez este verano. "Es excepcional, nunca había ocurrido en ningún otro jardín botánico", dijo el portavoz del jardín Franck Hidvegi.
La atracción está asegurada por lo que el jardín ha ampliado sus horarios de apertura, pues una vez que florezca se acaba el espectáculo. "La floración es muy breve, como mucho tres días. Después se marchitará y habrá que esperar varios años para verla florecer de nuevo", dijo Hidvegi.
La planta cuyo nombre científico es Amorphophallus tintanum, procede de los bosques tropicales de Sumatra, en Indonesia, donde está en peligro a causa de la deforestación.