Kirsten Green apenas había incursionado en la inversión en empresas emergentes antes de iniciar un fondo de capital de riesgo en 2012. Lo que sí tenía eran años de experiencia cubriendo la industria de las ventas minoristas como analista en Wall Street.
Green, de 45 años, aprovechó ese conocimiento de las ventas minoristas en sus esfuerzos con el capital de riesgo y lo usó para aportar asesoría especializada a sus empresas.
En una de sus primeras decisiones como capitalista aventurera, fue parte de una inversión de $1 millón en Dollar Shave Club, entonces una compañía diminuta, que vendía rastrillos a consumidores en línea. Posteriormente, invirtió en Jet.com, una empresa emergente de comercio electrónico que fue franca sobre querer enfrentarse a Amazon.
El año pasado, esas dos compañías emergentes se sacaron la lotería: Unilever compró Dollar Shave Club por $1.000 millones, mientras Wal-Mart compraba Jet.com por $3.300 millones. Para Green, eso se tradujo en una bonanza de rendimientos.
Pensar en “los adquirientes, el estado de los mercados públicos, cómo se está valuando un negocio; esa es la manera esencial de comprender el ecosistema general” de las empresas emergentes, dijo Green, cuya firma poco conocida, Forerunner Ventures, tiene su sede en San Francisco.
Los acuerdos de Dollar Shave Club y Jet.com han ayudado a impulsar a Green este año al número 12 entre los 50 principales capitalistas de riesgo del mundo, según datos recopilados por CB Insights, una firma de investigación que da seguimiento al capital aventurero.
Otros capitalistas en la lista también terminaron en sus sitios en parte debido a grandes ventas u ofertas públicas iniciales de sus empresas emergentes, incluida la reciente OPI de Snap, el creador de la aplicación de mensajes efímeros Snapchat.
Cosecha de dinero
El lugar de Green en la lista demuestra que la verdadera medida del éxito en el capital de riesgo es cuánto vale una empresa emergente cuando se vende o se cotiza públicamente. Eso aplica especialmente ahora que se espera que la tasa de ventas e OPIs de empresas emergentes –conocidas como salidas de inversión– repunten en 2017 después de una larga calma, según Renaissance Capital, que da seguimiento a las ofertas públicas. Este año, ya ha visto fuertes debuts en el mercado accionario de parte de Snap y el fabricante de software corporativo Mulesoft.
Eso significa que los capitalistas de riesgo que nutrieron a esas empresas finalmente pueden cosechar algo de efectivo. “El hecho de que estemos viendo más salidas, y una oportunidad más fuerte para las salidas, es bueno”, dijo Theresa S. Hajer, directora administrativa de Cambridge Associates, una firma de asesoría de inversiones.
Green es una capitalista aventurera poco ortodoxa por varias razones. Aparte de nunca haber trabajado en una empresa de capital de riesgo antes de empezar por su cuenta en 2012, también es una mujer en un campo dominado por hombres. (De los 20 principales inversionistas de riesgo este año, solo dos fueron mujeres).
Ojo de comerciante
A diferencia de muchos inversionistas de riesgo generalistas, que trabajan en una variedad de áreas, Green se enfoca específicamente en el comercio y otras empresas relacionadas con las ventas minoristas.
Los inversionistas han intentado durante años encontrar al próximo Amazon o eBay, a menudo con poco éxito. Recientes fracasos de comercio electrónico de alto perfil incluyen a Fab.com, One Kings Lane, Shoedazzle y Gilt, todos los cuales fueron financiados por firmas de inversión de renombre que incluyeron a Andreessen Horowitz, Greylock Partners y General Atlantic.
Las raíces de Green en las ventas minoristas son profundas. Empezó su carrera como contadora que auditaba a minoristas. A fines de los años 90, cubría esas compañías como analista accionaria para Montgomery Securities, estudiando mediciones rebuscadas como tráfico de clientes en locales minoristas y una rentabilidad de tienda por metro cuadrado. También observó el ascenso de marcas como Abercrombie & Fitch, Coach y Ugg.
Concluyó que el comercio en línea sería la base de la siguiente generación de marcas minoristas importantes, pero que los consumidores no dependerían de una sola forma de comprar.
Con el ascenso de Amazon y otros minoristas en línea, Green vio más declaraciones de bancarrota de minoristas tradicionales, así como noticias de cierres de tiendas y reportes de cambios en las participaciones de mercado. Pero también vio a las tiendas tener buenos resultados cuando las compañías podían hacer una conexión emocional con los compradores y analizar mejor su comportamiento.
“Las ventas minoristas son ahora impulsadas totalmente por los consumidores y sus necesidades”, dijo. “La gente puede comprar lo que quiera en cualquier forma que quiera. Esa tendencia empezó hace tiempo, y realmente ha cambiado todo”.
Aciertos y errores
En 2003, Green decidió pasar del análisis de este cambio a invertir en él. Por un tiempo, trabajó como consultora de una firma de capital privado antes de volcarse al capital de riesgo debido a su interés en las empresas jóvenes. En 2010, recaudó un fondo de inversión ángel para hacer inversiones de una sola vez en empresas como Birchbox, un servicio de suscripción de cosméticos, y Warby Parker, un minorista de lentes de sol, mientras estudiaba cómo recaudar un fondo de riesgo.
En 2012, Green recaudó un fondo aventurero de $40 millones . La firma de inversión Cendana Capital contribuyó con $10 millones, pese al hecho de que ella nunca había trabajado como inversionista tradicional o emprendedora en tecnología.
“Cuando hablamos con los fundadores con los que ella había trabajado, todos dijeron que tenía la mejor experiencia y daba los mejores consejos”, dijo Michael Kim, socio administrativo de Cendana, acerca de Green.
Con ese fondo, Green ayudó a dirigir la inversión de $1 millón en Dollar Shave Club cuando la empresa estaba valuada en apenas $5 millones. También se unió al consejo de la compañía.
Después de que Green invirtió en Jet.com en 2014, charlaba con los ejecutivos de Jet casi todas las semanas sobre temas que incluían estrategia y potenciales adquisiciones, dijo Katie Finnegan, quien era la jefa de desarrollo corporativo. Finnegan dijo que Jet aún consulta con Green incluso después de la venta de la compañía a Wal-Mart.
Green tiene “un verdadero instinto para las marcas”, dijo Rachel Blumenthal, fundadora de la empresa emergente de ropa para niños Rockets of Awesome, que vende a suscriptores una caja personalizada de ropa para cada nueva temporada. Blumenthal llegó a conocer a Green en Warby Parker, que fue fundada por el esposo de Blumenthal, Neil.
Green invirtió en Rockets of Awesome el año pasado y ha llevado sus opiniones sobre el comportamiento del consumidor a la empresa emergente.
En una reciente reunión de consejo de la compañía, Green argumentó que la caja de suscripción del minorista necesitaba seguir siendo distinta de sus otros empaques. Rachel Blumenthal estuvo de acuerdo, diciendo que hacer a la caja “la joya de la corona de la experiencia del cliente” era la decisión correcta porque era una de las formas más poderosas de llegar a los consumidores y aprender sobre ellos.
Green forma parte de más de 10 consejos de empresas, incluido el de Bonobos, una compañía de ropa para hombre, la marca de maquillaje Glossier y la compañía de vitaminas Ritual.
También ha tenido su parte de errores. Threadflip, una tienda a consignación en línea en la cual invirtió, cerró el año pasado y se convirtió en parte de La Tote, un servicio de renta de ropa.
En cuanto a las salidas, Green comentó que les dice a los emprendedores que espera que cotizar a las empresas en bolsa o venderlas a un comprador tan pronto como sea adecuado. De las 30 compañías en su primer fondo, ocho han sido adquiridas. En su segundo fondo de 75 millones de dólares, el cual recaudó en 2014, dos compañías han sido adquiridas, incluida Jet.com.
“Ahora que la gente es bombardeada con información, estamos en una era dorada donde las marcas importan”, dijo Green. “Quiero ser parte de esta nueva era”.