En la exposición de motivos del proyecto de ley del presupuesto de la República del 2017, el Ministerio de Hacienda dejó ver que espera un incremento en las tasas de interés para el 2017 o, como mínimo, un aumento de décimas porcentuales en la tasa implícita que tiene la deuda del Gobierno.
Estima un aumento en el costo y el volumen de sus obligaciones, así como un mayor peso de los intereses en el total debido a varias razones.
En primer lugar, Hacienda argumentó que existe una porción de la deuda bonificada a tasa variable, por lo que el incremento en la deuda y en los intereses tendrían algún efecto en los rendimientos a futuro.
El otro de los factores que está considerando es el tipo de cambio, pues si aumenta, afectaría la porción de bonos de Hacienda que están en dólares y, en especial, los recursos que debe destinar a pagar los intereses de esos instrumentos dolarizados.
Con una devaluación, Hacienda tendría que usar más colones para conseguir los dólares destinados al pago de intereses de sus bonos, locales o internacionales (eurobonos).
Según el presupuesto presentado el pasado 1 de setiembre a la Asamblea Legislativa, lo que se denomina como la tasa ímplicita de la deuda externa e interna pasaría de 6,92% a 7,07%.
“En particular, quizá el factor explicativo más importante del porqué aumentan los intereses, es que la deuda contraída en periodos anteriores, el 78%, se pactó a tasas fijas”, esgrimió Hacienda en el documento.
Según los datos publicados por esta cartera, la tasa de interés para deuda interna (promedio ponderado) ha venido en aumento en el 2016. Pasó de 6,73% a 7,22% de enero a julio.
La curva de rendimiento local costarricense también ha tenido algunos movimientos al alza entre enero y la primera semana de setiembre.
El aumento promedio en las tasas de ese momento se registró con más claridad en los bonos que vencen de uno a cuatro años.
En el 2016, el mayor volumen de colocaciones por parte de Hacienda en las subastas de bonos se ha concentrado en tasas promedio de 5,8% y 8,1%.
Sin embargo, al examinar los rendimientos promedio de cada bono subastado este año, más bien se nota un descenso en los intereses que al final logró Hacienda. Por ejemplo, el bono con mayor volumen subastado, con vencimiento al 2018, comenzó el año a una tasa de 5,8%, pero la más reciente fue de 5,5%, según revelan los datos de la Bolsa Nacional de Valores (BNV).
Expectativas
Para Adriana Rodríguez, economista de Scotiabank, Hacienda ha expresado la preocupación por el alto endeudamiento y, por lo tanto, no es de extrañar que para el presupuesto incorporen el escenario de condiciones menos favorables a las obtenidas hasta el momento.
“Los más recientes movimientos al alza en las expectativas del tipo de cambio, el comportamiento de la liquidez en moneda nacional y algún incremento en las tasas de referencia internacionales deberían incidir sobre el comportamiento de las tasas nominales en colones”, apuntó.
Por su parte, Luis Diego Herrera, economista de Grupo Acobo, respaldó aún más ese pronóstico.
Recordó que Hacienda consideró los supuestos establecidos en la revisión del Programa Macroeconómico 2016-2017, en el que el Banco Central consideró se esperan presiones sobre las tasas en colones por el efecto del estrujamiento el próximo año.
El plan del Central dice puntualmente que la competencia por fondos prestables llevaría al encogimiento del sector privado y limitaría el margen de acción de esa entidad.
Herrera añadió el efecto de una de las políticas que impulsa el Central, a saber, la de colonizar aún más los créditos.
“En el tanto las personas empiecen a demandar mayores créditos en colones, la demanda privada competirá con la pública por los recursos, presionando las tasas de interés al alza”, aseguró Herrera.
Para Freddy Quesada, gerente de INS Valores, la explicación de Hacienda da a interpretar que varios componentes o renglones se incrementarán: el gasto por intereses y el propio saldo de la deuda y, por ese motivo, la tasa implícita será mayor.
Por su parte, Douglas Montero, director de Aldesa Fondos de Inversión, explicó que la exposición de motivos no sugiere un aumento en la tasas de interés, pues más bien indica que sube el saldo de la deuda y, por ende, el porcentaje que representan los intereses aumentarán.
En sus proyecciones, en Aldesa no están vislumbrando un aumento en las tasas de interés, pues, incluso, Montero citó la experiencia de este año, para el cual se esperaban aumentos en los rendimientos debido a la ausencia de la emisión de más eurobonos, pero hasta el momento las tasas más bien van a la baja.
Para Herrera, las tasas se mantendrían estables, o a lo sumo tendrían un incremento leve, pero dependerá de la confianza que logre generar Hacienda sobre su gestión de la deuda entre los inversionistas.