El Comité de Política Monetaria de la Reserva Federal (FOMC) de Estados Unidos decidió este miércoles mantener sin cambios su política monetaria ultraflexible para sostener la reactivación de la economía.
De este modo, la Reserva Federal (FED) continuará con sus compras de bonos del Tesoro y títulos hipotecarios por $85.000 millones mensuales y mantendrá su tasa de referencia entre 0 y 0,25%, tal como lo hace desde finales del 2008.
El banco central sostiene que "la política presupuestal restringe el crecimiento económico" pero, a diferencia de su comunicado anterior, no menciona el alza de las tasas inmobiliarias que podría comprometer la reactivación.
La FED destaca; no obstante, que la recuperación en el sector inmobiliario "se desaceleró un poco durante los meses recientes".
El organismo señala que en su conjunto, la actividad económica continuó "avanzando a un ritmo moderado".
Al igual que al finalizar su reunión de setiembre, el FOMC dijo "esperar más pruebas de avances" antes de ajustar el ritmo de compra de activos.
Solo un miembro del Comité de Política Monetaria, Esther George, de la filial regional de Kansas City, votó contra esta decisión, al igual que en la reunión anterior, manifestando preocupación por las consecuencias de esta política sobre la inflación.
Wall Street recuperó vigor tras el anuncio que ya era anticipado por el mercado: el Dow Jones volvía al terreno positivo y el Nasdaq borraba una parte de sus pérdidas.
El euro, en tanto, se replegaba un poco ante el dólar.