El Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) aprobó ayer, lunes 19 de agosto, el paquete de reformas macroprudenciales impulsadas por la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef). Los cambios harán más estricta la medición del riesgo a los bancos y a los solicitantes de créditos.
Esta luz verde da inicia el proceso de transformación del esquema regulatorio de uno basado en el cumplimiento de requisitos, a uno que gire en torno a la gestión de riesgos.
"Las medidas aprobadas en esta oportunidad no deben interpretarse como medidas que restrinjan el crédito", aseguró José Luis Arce, presidente del Conassif en un comunicado de prensa.
Los cambios
La separación de calces por tipo de moneda, el reforzamiento del gobierno corporativo y el cálculo de un coeficiente de liquidez son instrumentos que pretenden reducir la exposición del sistema financiero a riesgos de liquidez.
Para gestionar el riesgo de crédito, paralelo a los tests de estrés, los bancos deberán establecer mayores estimaciones sobre las operaciones de préstamos vigentes y futuros, de acuerdo a los riesgos asociados a sus carteras crediticias. Además, deberán fortalecer los procesos para el otorgamiento de préstamos a personas o empresas que representen un mayor riesgo.
"Los objetivos de los órganos de supervisión son fortalecer el proceso de medición de la capacidad de pago evitando los excesos del sobreendeudamiento, no exponer a las entidades financieras a riesgos innecesarios y, lo más importante, salvaguardar el dinero de los ahorrantes", manifestó Arce.
Entre las reformas también está la incorporación de incentivos para que las entidades establezcan metodologías para el análisis de cpaacidad de pago de los deudores, no solo ante riesgos cambiarios, sino también de fluctuaciones de las tasas de interés.
Aplicación gradual
La implementación de las nuevas regulaciones será gradual, con plazos que van de 12 a 48 meses. La mayoría de los cambios comenzarían a tener efecto en enero de 2014.
"Al tratarse de medidas de naturaleza prudencial, que impactan en el funcionamiento y operación de las entidades financieras, lo razonable es que el proceso de implementación tenga gradualidades adecuadas", dijo Javier Cascante, jefe de la Sugef en el comunicado de prensa.
Precisamente el tema de la gradualidad en la aplicación de las medidas fue uno de los puntos de negociación con el sector bancario.
"Mi primera reacción es de sorpresa. El viernes todavía estábamos negociando, y hoy nos informan que quedó aprobado. No sabemos qué pasó con nuestras propuestas", comentó Jimmy Hernández, gerente general de Banco Cathay.
Lo que si es claro es que las nuevas regulaciones supondrán un incremento en los costos operativos de los bancos. Por ejemplo la aplicación de los test de estrés a los deudores obligará a modificar sistemas de información en las entidades.
"Redunda en un mayor costo operativo de los bancos y podría a la vuelta de la esquina significar mayores precios de los servicios bancarios en general", comentó Gilberto Serrano, gerente general de Banco Lafise y presidente de la Asociación Bancaria Costarricense.
Las reformas han sido objeto de especial interés por parte de Rodrigo Bolaños, presidente del Banco Central, quien en varias ocasiones ha llamado la atención sobre los riesgos que presenta la gran cantidad de préstamos en dólares otorgados a personas y empresas que generan sus ingresos en colones.
Algunas de las nuevas regulaciones tenderán a elevar el costo del endeudamiento en dólares. "El precio del crédito en dólares debe reflejar el riesgo", comentó Bolaños durante la presentación de la revisión al Programa Macroeconómico, a finales de julio pasado.