La cartera de las propiedades recibidas en garantía en poder de los bancos aceleró su ritmo de crecimiento en el último año, luego de tres periodos en los que – debido a la dinámica venta de bienes– el saldo mostró reducciones o se mantenía estable.
Las entidades financieras se adjudican estos bienes al ejecutar las garantías de préstamos incobrables y, posteriormente, los sacan a la venta.
En esos largos listados están incluidas casas, lotes, fincas, locales comerciales e, inclusive, bienes muebles como vehículos, los cuales están disponibles para su compra.
Los bancos procuran deshacerse rápidamente de estas garantías, dado que su negocio no es la correduría inmobiliaria y representan un costo.
Con tal de colocar esos bienes en el mercado, los mismos bancos las venden, inclusive, a la mitad de su precio real y los financian con condiciones más atractivas, tales como plazos de hasta 40 años, cero gastos de formalización y prestan hasta el 100% del valor del bien.
La cartera de estos bienes alcanzó los ¢61.683 millones a marzo de este 2017, tras un crecimiento de 4% respecto al acumulado al mismo mes de 2016.
Se trata de un incremento equivalente a ¢2.549 millones, una cifra muy similar al monto en que más bien se había reducido el año anterior.
Además, ese repunte surge luego de tres periodos continuos en los que el mercado redujo o sostuvo la cartera de bienes realizables o adjudicados.
En este caso, la reducción de la cartera no quiere decir que ingresaron menos bienes (o que recibieron bienes menos valorado) respecto al periodo previo, sino que la banca logró vender un saldo mayor del que adjudicó.
Por tipo de entidad
La banca pública se mantiene a la cabeza en el saldo de bienes adjudicados y esta cartera repuntó 5,4% interanual a marzo.
Las propiedades que pasaron a manos de estas entidades están ubicadas principalmente en zonas costeras, como Guanacaste y Puntarenas.
De entrada, el Banco Nacional de Costa Rica (BNCR) acumula la mayor porción de la cartera de bienes entre entidades públicas, pero en el último año (de marzo del 2016 a marzo del 2017) mantuvo un equilibrio entre la venta y la adjudicación de propiedades, por lo que el saldo prácticamente no cambió.
Entre la banca pública, el segundo saldo más abultado está en manos del Banco de Costa Rica (BCR) y fue el que más aumentó (22%) en el periodo.
Según Marco Delgado, coordinador de bienes adquiridos del BCR, el resultado obedece a una mayor eficiencia en el cobro de los préstamos lo que ha llevado a que muchos bienes ingresen a la cartera.
En el lapso analizado, la entidad adjudicó 437 bienes y vendió 412. En periodos previos, la diferencia era mucho más amplia.
El Banco Popular también aumentó su cartera de adjudicados, un 4% aunque en el mismo mes del año previo registró una reducción de 25%.
Bancrédito, por su parte, cuenta con el menor saldo de bienes en garantía, pero fue el banco que más creció a nivel interanual a marzo de 2016. Sin embargo, el acumulado a marzo de este 2017, más bien cayó 13,5%.
Esta entidad tiene un plan para deshacerse de propiedades, ante su necesidad de aumentar ingresos y reducir gastos administrativos. En 2016, vendió ¢2.884 millones en bienes, según había indicado Gerardo Porras, gerente de Bancrédito.
LEA: Futuro de Bancrédito dependerá de negocios marginales
Por el lado de las mutuales, el resultado global creció más que el de la banca pública, empujado por el resultado de la Mutual Cartago de Ahorro y Préstamo (Mucap) que creció 16%.
Entre tanto, Grupo Mutual redujo la cuenta en un 3%.
Mucap vendió 136 propiedades entre marzo de 2016 y marzo de 2017, por un monto de ¢3.923 millones, pero se adjudicó bienes por ¢4.509 millones.
La política de la entidad es aplicar descuentos en los precios de venta y, por tanto, consideran que el ritmo de ventas se mantendrá para reducir el inventario, explicó Bernal Allen, subgerente financiero de la entidad.
En la otra acera, la banca privada redujo el saldo de sus bienes, gracias a los resultados del BAC San José, BCT, Davivienda, Prival Bank y Scotiabank.
Sin embargo, los bancos más pequeños, como Cathay, Lafise, Improsa y Promerica, más bien tuvieron fuertes repuntes en su cuenta de bienes adjudicados.
Financiamiento atractivo
Los bienes adjudicados requieren de una inversión inicial de parte de los bancos antes de venderlos, pues deben darles mantenimiento.
Sin embargo, el beneficio que reciben sus compradores es que estas propiedades salen a la venta hasta por la mitad de su precio real.
En ese listado, el comprador podrá elegir entre terrenos que arrancan en ¢2 millones pero pueden llegar hasta los ¢2.000 millones, así como casas o apartamentos que inician en ¢3 millones y llegan a ¢800 millones.
Si el comprador necesita financiamiento, las entidades brindan condiciones atractivas.
El monto del financiamiento varía entre un 80% y 100% del valor del bien, con plazos de hasta 30 y 40 años en colones y de 20 a 25 en dólares.
Las tasas en colones rondan el 8% o 10%, fija los primeros dos o 10 años. En dólares, gira en torno al 5,5%, fija los primeros cinco años o más.
En el caso del Banco Popular, en algunos casos, la tasa en colones equiparan la Tasa Básica Pasiva (TBP) vigente.
Grupo Mutual ofrece crédito a 6,95% en colones, fija el primer año. Además, los honorarios legales, las comisiones y el avalúo son completamente gratuitos.