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Robles enfatizó que el IVM entró en una dinámica de decrecimiento de reservas desde el 2011. (Archivo GN)
La Superintendencia de Pensiones (Supen) reiteró este miércoles su preocupación sobre el estado de las finanzas del régimen de pensiones de Invalidez, Vejez y Muerte que administra la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).
En entrevista con adn 90.7 FM, Edgar Robles, superintendente de Pensiones, alertó sobre el desgaste que sufren las reservas de dicho régimen de jubilación.
"Deberíamos estar atentos para evitar que este régimen colapse", comentó Robles.
El argumento de la Supén es que la CCSS se ha amparado es estudios elaborados por la misma institución para defender la gestión que hace de estos fondos. Empero, Robles calificó estos análisis como "maquillados" y "amañados".
Entre los motivos para descalificar los estudios de la CCSS, la Supén señala que utilizan supuestos que no son acordes con la realidad: que las personas se retiran con más edad, que más personas participan en el régimen, que las personas cotizan más y que los ingresos son mayores.
Robles enfatizó que el régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) entró en una dinámica de decrecimiento de las reservas desde el 2011, mientras que la CCSS esperaba que comenzara a ocurrir en el 2028.
"Las reservas son un indicador de que se necesitan ajustes", aseveró el superintendente.
La Superintendencia afirma que urge comenzar con reformas en el sistema de pensiones de la CCSS, pues un cambio comenzaría a estar en marcha hasta el 2018.
No obstante, no existe una estimación certera de los plazos o el estado real del régimen.
"La Caja nos tiene en un oscurantismo total sobre las cifras", argumentó Robles en relación sobre los datos de la institución. Supén recordó que legalmente no tiene capacidad de supervisión o regulación sobre el IVM.
