Aparicio Cordero, fundador y gerente general de la franquicia Maridos y Esposas de Alquiler, creó su negocio a raíz de una necesidad y un vacío que detectó en el mercado.
Cordero es un apasionado por las noticias y por la actualidad de las franquicias a nivel mundial, tanto así que hasta en su tiempo libre respira de este ambiente empresarial.
Años atrás, este empresario se había desempeñado como vendedor y escaló al puesto de gerente de ventas en una compañía de consumo masivo en el país.
Desde entonces se caracterizó por su espíritu emprendedor. Desarrolló proyectos en restaurantes y bebidas empacadas en polietileno.
Sin embargo, atravesó momentos difíciles en el 2000 cuando enfrentaba problemas para conseguir trabajo.
Lejos de dejarse vencer, Cordero comenzó a ejecutar algunos servicios de limpieza, carpintería, pintura y otros quehaceres con dos ayudantes en San José.
Luego de operar bajo este esquema durante cinco años, decidió convertir el modelo de su empresa en franquicia.
Durante el proceso invirtió $80.000 de forma paulatina.
En el 2007, lanzó la franquicia y capturó 15 microfranquiciados en el primer año. Su crecimiento fue exponencial y no se detiene.
Actualmente cuenta con más de 300 microfranquiciados en Costa Rica y en países como Panamá, Guatemala, Honduras, El Salvador, México. Ahora se dirige hacia Suramérica empezando con Argentina y seguido por Uruguay.
Cordero ha trabajado para marcar la diferencia y vencer las barreras que impiden a las personas pensar en ser emprendedores, pues “el sistema educa para ser empleados”, añadió.
El empresario ha lidiado con otras barreras como las limitaciones tecnológicas y “los costos desproporcionados en servicios como el Internet”, para sacar su negocio adelante.
A pesar de la expansión y los logros tan significativos que ha obtenido, Cordero se sigue mostrando como un hombre sencillo que ama comer platillos criollos, como los famosos picadillos.
Edad:
53
Estado civil
Casado
Grado académico
Post-Grado en Franquicias
Puestos anteriores
Gerente de Mercadeo y Ventas.