La práctica de meditación en el mundo empresarial está creciendo y es un tema que se va incorporado en programas internacionales de gerencia y desarrollo organizacional. Su entrenamiento busca “poner en forma” la mente para lograr líderes “conscientes”; tarea compleja en una economía globalizada, que genera niveles elevados de tensión.
De acuerdo con resultados preliminares de investigaciones científicas, cultivar este estado de conciencia a través de la meditación, facilita el foco y claridad del pensamiento y estimula la creatividad y compasión. Estos beneficios impactan la calidad de la comunicación, manejo de conflictos, trabajo en equipo y solución de problemas.
Desde el 2009, General Mills fue pionera en el uso de estos innovadores programas de liderazgo. La Universidad de Massachussetts creó centros de entrenamiento para la facultad de medicina que evolucionó para atender la gran demanda que hoy tiene de ejecutivos. La ciencia médica ha legitimizado la meditación para producir cambios de estado de corta duración y cambios de carácter a largo plazo.
En grandes ciudades como Londres, bancos, fondos de inversión y firmas de servicios profesionales, entre otras, están siendo más proactivas en la promoción de la salud, adoptando esta forma de aliviar tensiones. En esta ciudad, se estima que a las empresas les cuesta al año $26.000 millones cubrir enfermedades, ausencias, baja productividad y costos de reclutamiento.