Cuando se trata de franquicias de comida, los restaurantes especializados en menús autóctonos crecen a paso firme en el país.
Cada vez es más común encontrar en plazas de comidas y centros comerciales, opciones gastronómicas enfocadas en un país o tipo de comida determinado, lo que hace atractivos estos establecimientos para el consumidor.
Los costarricenses hoy se debaten entre muchas opciones de franquicias especializadas en gastronomías tradicionales de otras culturas, como la mexicana, la peruana, la asiática e, incluso, la comida típica nacional.
Chancay, en Plaza Antares y Plaza Itzcatzu; La Divina Comida en Avenida Escazú; Fonda Azteca, ubicada en Momentum Pinares, Lincoln Plaza, Distrito 4 y Terrazas Lindora; el Rancho de Ceci, ubicado en Alajuela; P. F. Chang’s en Avenida Escazú, y el más reciente, 100 Montaditos, que llegará a Lindora, son algunas de las marcas que se han especializado en este negocio.
Las franquicias en Costa Rica han crecido un 85% en los últimos cinco años, siendo las de origen nacional las que han tenido mayor desarrollo.
Estas se han triplicado en los últimos cuatro años, y representaban el 22% del total de franquicias para el 2015.
En este tipo de negocio, el sector alimentación significa el 32% del total de franquicias en el país.
Las propuestas de estos negocios de comida autóctona se han diversificado para acceder a más consumidores.
Alejandro Miguel, gerente de operaciones de La Fonda Azteca, comenta que su estrategia ha sido adaptar el negocio a diferentes formatos como el de food court y el de restaurante e, incluso, reubicando algunos puntos.
Miguel afirma que el modelo de franquicia les ha ayudado a mantener sus estándares en todos sus negocios y a unificar la marca.
La Fonda Azteca inició operaciones en 2011 en Momentum Pinares y, en este 2016, cuenta con tres ubicaciones más, la más reciente ubicada en Terrazas Lindora.
El restaurante espera incursionar en Heredia y Alajuela el próximo año bajo este modelo, para luego extenderse fuera de la GAM y hacia Panamá.
Según la Organización Internacional de Franquicias, durante un periodo de 5 años, solo el 5% de los negocios independientes sobrevive, mientras que en el caso de las franquicias, el porcentaje es del 95%, lo que brinda a este modelo un gran atractivo para los inversionistas.
El éxito está en los detalles
Uno punto clave en el éxito de estos negocios culinarios es mantener la esencia de la cultura que representan en cada uno de sus productos.
Gran parte de estos restaurantes posee chefs y mano de obra propia de los países en los que se especializan.
Esto, aunado a los altos estándares reglamentarios que demandan los procesos de franquicias, hace que el sabor y la calidad de los productos y la presentación de los establecimientos se mantenga en el tiempo.
Para Douglas Rodríguez, gerente del Rancho de Ceci –la primera franquicia de comida tradicional costarricense–, mantener la cultura del país en sus productos es algo fundamental.
“Los costarricenses ahora viajan más, exploran más y les gusta saber qué comen las otras culturas, cuáles son sus costumbres, qué diferencia a una cultura de la otra y eso precisamente vuelve atractivo este tipo de negocios”, comentó Rodríguez.
Es precisamente esta tendencia de consumo que invita a experimentar productos de otras culturas lo que ha vuelto a nuestro país un mercado atractivo a franquicias internacionales.
Elementos claves
Existe un mezcla de factores que hacen de estos lugares espacios cotizados por los consumidores y que, además, hacen de Costa Rica un terreno fértil para este tipo de inversiones.
Sophie Maarmillod, coordinadora regional de mercadeo para P. F. Chang’s, asegura que lo que el consumidor busca es una experiencia completa, que no depende exclusivamente del menú o el tipo de comida.
En estos establecimientos, el cliente busca una fórmula que combine ambientación, música, servicio y variedad.
Para ella, Costa Rica cumple con todos los factores que requiere la franquicia para realizar una apertura de marca.
“En el país existe una explosión de la escena culinaria en la que los consumidores están más abiertos que nunca a probar nuevos sabores”, afirmó Maarmillod.
El crecimiento económico, la disponibilidad de bienes raíces, la demanda del consumidor y otros factores claves determinaron que la franquicia pudiera colocarse en el país hace dos años.
Esta franquicia espera establecer un segundo restaurante en el país a corto plazo.
Más recientemente, incursionó, 100 Montaditos, restaurante de comida tradicional española que está presente 360 ubicaciones en el mundo.
La marca abrirá su primer establecimiento en diciembre de este año, en Terrazas Lindora. Esta es una franquicia que ofrece elementos típicos de la cultura y gastronomía españolas, con ingredientes típicos de ese país.
Mario Barzuna, responsable de traer a esta franquicia al mercado, confirmó que ya se está valorando un segundo local en el este de San José, para el próximo año.