El miércoles 29 de julio Pedro Beirute, director ejecutivo de Procomer, presentó a una amplia audiencia y al país los resultados de un estudio sobre el impacto y valor del Régimen de Zona Franca (RZF) para Costa Rica.
Para el estudio se utilizó una metodología internacionalmente reconocida que mide el Beneficio País Neto a partir del costo de la exoneraciones otorgadas y los costos directos de operar Cinde, la entidad encargada de la atracción de inversiones.
La conclusión más importante es que entre el 2010 y el 2014 el país ha recibido $5,7 de retorno por cada dólar invertido. Un retorno económico claro y contundente sobre el valor del RZF.
En ese período las empresas y trabajadores del RZF aportaron $434 millones a la CCSS y $20,5 millones al INA. El empleo en el Régimen aportó $1.593 millones en salarios directos, 40% de ellos a mujeres. En el 2014 representó $1.573 millones en compras a empresas nacionales.
Las exportaciones del RZF representaron más de la mitad del total exportado por el país, lo que hace una contribución importante al PIB y nos abre la posibilidad de alcanzar mayor eficiencia nacional por medio del comercio internacional.
Y hay muchos otros resultados.
Lo importante es entender que aparte de estas contribuciones cuantificables, el Régimen representa transferencias de tecnología, cultura empresarial, acceso a nuevos mercados, nuevas formas de producción y servicio, y capacitación que luego se traslada a otros sectores productivos o a nuevas empresas creadas por sus empleados.
Es importante que Costa Rica se entere, reconozca y celebre los resultados de este estudio y del trabajo de esa alianza que representa la interacción de tres décadas entre Cinde, Procomer y el Ministerio de Comercio Exterior.
El Régimen de Zona Franca ha sido formalmente confirmado como uno de los motores importantes del desarrollo económico y social de nuestro país.