Intervención de Racsa entrará a fase crítica

La salud financiera de Radiográfica Costarricense (Racsa) presenta una mejora, pero el tratamiento que le aplica el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) entra en fase crítica.

Su efectividad será evaluada por Carlos Obregón, nuevo presidente ejecutivo del ICE, quien deberá decidir si mantiene la prescripción o la varía.

En el 2013, el balance de los ingresos y gastos operativos de Racsa arrojaron $14,3 millones en pérdidas, un 24% menos que en el 2012. Ese año, la subsidiaria del ICE tuvo ingresos operativos por $48,6 millones, pero los gastos superaron los $62,9 millones.

Esta cifra en rojo presenta una leve baja de $4,5 millones respecto de los resultados del 2011 (cuando arrancó la competencia en el mercado de Internet fijo) y del 2012, cuando el desequilibrio rondó los $18 millones.

Lo anterior, según información suministrada por Racsa a este semanario sobre los resultados operativos de la empresa.

Esta información brinda una fotografía de la operación del negocio y deja excluida los movimientos extraordinarios como, por ejemplo, la venta de activos, subsidios y pago de activos.

“La meta es cerrar el año sin pérdidas y empezar a generar ganancias en el 2015”, dijo Hernán Acuña, director ejecutivo de Racsa, quien ejerce como presidente de su Junta Directiva y miembro del Consejo Directivo del ICE.

Son tres puestos que asumió hace un año y que, según afirma, le han permitido mitigar los roces históricos con la casa matriz para la aprobación y ejecución de las ideas de negocios.

No obstante, el ejecutivo admite que no puede asegurar la sostenibilidad de esta condición. Él dejará su lazo con el ICE en junio y con Racsa en agosto.

Intervención del ICE

Acuña explicó que la reducción en las pérdidas es producto de un plan que inició en el 2012, dirigido desde la casa matriz. “El ICE, en el buen término de la palabra, hace una intervención a Racsa”, dijo Acuña.

El funcionario detalló que el plan, que está en ejecución, ha implicado una “recomposición” financiera, un cambio en el modelo de negocio (de proveedor de conectividad a proveedor de soluciones) y ajustes internos.

“Esto tenía dos componentes. Usted (Racsa) se convierte en el socio comercializador del ICE, que para eso es bueno. Y el ICE se hace cargo de aportarle la infraestructura que necesita (Racsa)”, aclaró.

Esto luego de que la Contraloría General de la República emitió un informe en el 2012, declarado confidencial, que pedía al ICE tomar acciones.

“El informe de la Contraloría quería una intervención no del ICE, sino de un tercero. Eso es lo que había esbozado. La Contraloría cambia su versión final y le dice al ICE que ponga mucha atención a su subsidiaria”, dijo.

Por ello, el ejecutivo asegura que Racsa tiene el soporte “absoluto y total”de su casa matriz.

Ese respaldo permitió a Racsa refinanciar deudas por $29 millones con mejores condiciones respecto a la oferta de la banca. A esto se suma titularización de proyectos y la transferencia de las plataformas de Racsa al ICE.

“Se van a trasladar las plataformas que tienen que ver con el 1155 (páginas amarrillas), cómputo en la nube, el backhaul nacional y el resto del cable submarino, la interconexión con el mundo”, explicó Acuña.

Este traslado de infraestructura es un pendiente en la agenda del consejo directivo del ICE.

De aprobarse, Racsa recibiría $40 millones que el ICE rebajaría de la deudas. Y en adelante, la subsidiaria alquilaría el espacio que necesita en los tubos de la casa matriz que lleven a la nube.

No obstante, este respaldo de la corporación podría estar limitándose. En la última memoria de la Contraloría, que analiza los estados financieros completos y confidenciales, se advierte sobre un deterioro “significativo” de los márgenes de ganancias en los últimos tres años (entre diciembre de 2010 y setiembre de 2013).

“Mientras que para 2010 los excedentes representaron el 11% de los ingresos de operación, al término del tercer trimestre de 2013 esa relación cayó a un 1%”, detalla el documento.

En su memoria anual, el ente contralor vuelve a advertir sobre la situación de Racsa: ha reducido el gasto real a una tasa media anual del 14,5%, pero mantiene el déficit financiero que ha experimentado desde el 2008, con excepción del año 2011.

Meta del 2014: balance

Para el director ejecutivo de Racsa, el balance financiero del presente año no dejará pérdidas este año y estima que habrá ganancias en el 2015. “Eliminé 12 alianzas de un solo plomazo. Quedaron como ocho”, dijo Acuña, quien destacó que estudia romper el contrato con la empresa sueca ViaEuropa para crear una red de Internet ultraveloz, debido a la falta de respuesta de esa firma.

La renovada cartera de proyectos incluye convertirse en un canal de distribución (mayorista) de los chips celulares del ICE y entrar como operador móvil virtual (con la marca Full Móvil) mediante servicios de valor agregado e incluso con servicios pospago.

También darán al ICE la infraestructura necesaria para ofrecer el servicio de televisión interactiva por Internet.

Empero, la ruta trazada para recuperar el salud financiera todavía no está segura.

Las pérdidas operativas en el primer trimestre del 2012 y del 2013 pasaron de $2,1 millones a $419.000 respectivamente. Si se hace una proyección lineal aproximada, el balance aún sería negativo con $1,3 millones de déficit. Eso sí, un monto menor del registrado un año atrás ($14,3 millones).

Para Gilles Maury, consultor en telecomunicaciones de Deloitte, Racsa tiene el reto de implementar una estrategia con objetivos claros y concordantes con la la estrategia del ICE y mercado.

También que logre una eficiencia entre la casa matriz y la subsidiaria para que se tengan los recursos para lograr los objetivos. “Y se deben dictar los mecanismos internos de gobernanza para lograr la ejecución de los objetivos de la estrategia. Ahí hay temas de liderazgo y control”, dijo Maury.

El consultor recordó que la situación del mercado de telecomunicaciones obligó a los operadores en el mundo a enfocarse al corazón de su negocio, mientras que Racsa tomó “una dimensión más amplia”.

Por otra parte, Obregón destacó que la situación de su subsidiaria debe analizarse antes de tomar una decisión, ya que requiere ver los datos reales de la situación de Racsa.