Las ventas de dispositivos de tecnología del vestir (wearables) se triplicaron en los primeros tres meses del 2015 en relación al mismo periodo del año anterior.
Un informe de la compañía de estudios de mercado IDC publicado este miércoles indica que en el primer trimestre del 2014 se vendieron solamente 3,8 millones de dispositivos y que ahora, en el mismo periodo del 2015, se colocaron 11,4 millones.
La firma resaltó que ese incremento se produjo pese a que normalmente es un trimestre en el que —después de las ventas navideñas y de fin de año— hay un bajonazo en el mercado de consumo.
El incremento en la venta de los wearables demuestra mayor cantidad de dispositivos y el incremento en el interés de los usuarios, aparte del impulso recibido por el lanzamiento del reloj inteligente de Apple, que presiona a los competidores a reaccionar.
De manera simultánea los precios han caído.
Según IDC la erosión de los precios ha sido del 40% debido a que los cinco principales fabricantes han lanzado estrategias de masificación, bajando los precios para dominar sus segmentos de mercado, y para enfrentar a Apple, cuyo producto premium resulta siempre muy atractivo para los consumidores pese a su mayor costo.
IDC indica que el mercado de wearables es liderado por la firma Fitbit, que ocupa el 34% del marketshare y cuyas ventas crecieron 129% de un año a otro.
Le sigue Xiaomi, con 27% del marcado, y Garmin con 6% y un incremento de 133% en sus ventas.
Samsung es la cuarta firma con 5,3% del mercado y un incremento de sus ventas del 150%.
El quinto mayor fabricante de wearables es Jawbone, que tiene el 4,4% del marketshare y sufrió un aumento de ventas del 123%.
IDC también prevé un aumento de las apps para wearables, pues se pasará de las actuales 2.500 apps a las 349.000 que estima habrá en el 2019.
La firma indica que este es un nuevo campo de oportunidades para apps corporativas.
Para este año 2015 se espera que dos terceras partes de las aplicaciones de wearables sean para el Apple Watch.
Asimismo, las apps para wearables pasarán de representar el 10% del total de aplicaciones móviles al 17% al final de este mismo año, estima IDC.