Alimentación baja en carbohidratos ¿será su solución?

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Posiblemente usted ha escuchado hablar acerca de las dietas bajas en carbohidratos como una opción para bajar de peso o hasta las ha practicado. Para algunos son parte de una moda que viene y va, algunos las critican fuertemente y otras las consideran la mejor opción para la salud. Pero ¿qué dice la ciencia detrás de esta forma de alimentación? ¿será que sí son una buena opción para algunos? Veamos.

Las dietas bajas en carbohidratos son aquellos planes de alimentación en los que se restringen en diferentes niveles los granos, cereales, leguminosas, frutas y lácteos quedando como base los vegetales, proteínas y grasas. Existen diferentes formas de hacerlo: desde disminuir significativamente los granos, cereales y a veces leguminosas, eliminar por completo estos grupos o quitar toda fuente de carbohidrato incrementando de manera drástica el consumo de grasas para entrar en lo que se conoce como una dieta cetogénica.

¿Qué sucede en el cuerpo cuando se hace una dieta baja en carbohidratos?

Al consumir carbohidratos nuestro cuerpo libera una hormona llamada insulina. La insulina tiene diversas funciones, como mantener niveles adecuados de azúcar en la sangre, estimular la formación de grasa (lipogénesis) e inhibir la transformación de grasa en energía (lipólisis). Se ha demostrado que las dietas bajas en carbohidratos disminuyen la liberación de insulina de manera importante y esto se considera una de las mayores razones de éxito de estos planes.

Como mencioné anteriormente, en este tipo de alimentación se tiene un consumo de proteína más alto que un plan solamente bajo en calorías. Algunos estudios muestran que gracias a este consumo de proteína, hay una mayor saciedad, mayor gasto energético y mejor mantenimiento de la masa muscular que en otras dietas hipocalóricas o bajas en grasa.

Contrario a lo que muchos piensan, la salud llega a verse beneficiada al mostrarse mejoras en aspectos como: disminución en triglicéridos, presión arterial y glicemia así como aumento en HDL (colesterol bueno).

¿Quiénes son candidatos para llevar una alimentación de este tipo?

Aquellas personas con problemas de sobrepeso u obesidad cuya pérdida de peso es difícil, mujeres con síndrome de ovario poliquístico o personas con síndrome metabólico entre otros podrían considerar este tipo de alimentación como una opción para mejorar su peso o su salud.

Aunque aún queda mucho por investigar en este área, algunos estudios muestran que esta alimentación puede ser de beneficio para ciertos deportistas. El organismo se adapta a utilizar la grasa como combustible principal, mejorando su rendimiento en deportes de resistencia.

Sin embargo por favor tome en cuenta que cualquiera que desee iniciar en este proceso debe saber que ¡no debe verlo como una dieta temporal! Este tipo de alimentación está diseñada para ser un estilo de vida donde se deberán enfrentar muchos retos, pero al pasar el tiempo, sus resultados harán que valga la pena.

En el Centro de Nutrición nos hemos dedicado a estudiar de esta opción de alimentación para los que crean que un plan bajo en carbohidratos es para ellos. Nuestro nuevo reto Low Carb se adapta en sus distintas variaciones, a las necesidades personales, físicas y bioquímicas de cada uno, buscando como siempre darles una opción para mejorar su salud.

Búsquenos si desea más información de cualquiera de nuestros servicios o retos en nuestra página de internet www.centrodenutricion.co.cr o en nuestro Facebook.

Referencias

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Boden G, Sargrad K, Homko C, Mozzoli M, Stein TP. (2005) Effect of a Low-Carbohydrate Diet on Appetite, Blood Glucose Levels, and Insulin Resistance in Obese Patients with Type 2 Diabetes. Ann Intern Med.142:403-411.

Veldhorst, M.A.B., Westerterp, K.R. and Westerterp-Plantenga, M.S. (2012) Gluconeogenesis and protein-induced satiety, British Journal of Nutrition, 107(4), pp. 595–600.

Yancy WS, Olsen MK, Guyton JR, Bakst RP, Westman EC.(2004) A Low-Carbohydrate, Ketogenic Diet versus a Low-Fat Diet To Treat Obesity and Hyperlipidemia: A Randomized, Controlled Trial. Ann Intern Med.140:769-777

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