Esto también pasará...

Parte de la perspectiva que debemos ganar todos en estos momentos, tiene que ver con recordar la capacidad de supervivencia humana que tenemos.

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Una madre le regaló un reloj de pulsera para su cumpleaños a su hijo adolescente, que tenía grabadas esas palabras: Esto también, pasará.

He meditado mucho en la importancia de ganar perspectiva. Parte de la perspectiva que debemos ganar todos en estos momentos, tiene que ver con recordar la capacidad de supervivencia humana que tenemos.

Así que aquí algunas de mis reflexiones-aprendizajes sobre sobrevivientes de diferentes situaciones adversas. Sobrevivientes de cáncer, sobrevivientes del holocausto, sobrevivientes de guerras, personas mayores de 100 años… todas sobrevivientes.

No engañarse. No auto-engañarse respecto a la realidad y la seriedad de lo que ocurre.Sobreviviente de holocausto – sobreviviente de cáncer.

Fuerza de voluntad con propósito. Aún ante las circunstancias más extremas, los sobrevivientes aprendieron que creer que sobrevivirían para lograr un propósito posterior a la adversidad, esta creencia les salvó. “Tenemos que sobrevivir esta fase, este momento, este encierro, estas pérdidas, esta situación extrema para (medite en su caso personal)”. Sobreviviente del holocausto.

Perspectiva de largo plazo. Si usted se siente confundido, con compromisos que compiten en su interior y no sabe en realidad cómo decidir, pregúntele a su versión de 100 años. Su versión de 100 años le dará a usted la respuesta de cómo decidir para vivir sin arrepentimientos. Imagínese que es usted y que tiene a ese viejecito frente a usted, ¿qué decidiría? Sobreviviente de un asalto.

Ocupación (con o sin trabajo). Trate de mantenerse ocupado, de servir, de ser útil. Sobreviviente de más de 100 años de edad- sobreviviente del holocausto.

Usted es el principal responsable de lo que llena y ocupa su mente. Sobreviviente del cáncer.

Las peores condiciones sacan lo mejor de usted ¿va a ser un sobreviviente o una víctima? Sobreviviente holocausto.

Y cierro con una reflexión de Madeleine Albright que creció en medio de una guerra, sintiendo que podría morir en cualquier momento, con escasez de alimentos. Por su trabajo dentro y fuera del gobierno en los Estados Unidos, ha conocido muchas historias de sufrimiento, guerra, dolor, enfermedad, pero también de resiliencia, esperanza y sobrevivencia: “Ya sea que seamos impulsados por la nostalgia o la incomodidad de algo nuevo, es en los momentos anormales que más aprendemos sobre nosotros mismos y sobre los demás. Los amortiguadores que normalmente protegen nuestras emociones y calman nuestras mentes ya no funcionan tan bien en esos momentos. Nuestros horarios se ven interrumpidos y nuestras prioridades cambian. Nos encogemos, crecemos, incluso podemos morir; no nos quedamos igual. Esto es cierto tanto para las naciones como para las personas”.

Estamos viviendo momentos sin precedentes que cambiarán la historia universal, la historia de cada país, y nuestra propia historia personal.

Es en estos momentos que el acto de aprender, recordar, reflexionar sobre resiliencia y supervivencia humana, nos permitirá ganar perspectiva de largo plazo para gestionar mejor el hoy.

Hoy comparto dos videos. Uno sobre una sobreviviente del holocausto (https://www.youtube.com/watch?v=vEH0xjg8yz8), otro, sobre un hombre joven, que tenía a los 22 años, su vida prácticamente terminada (https://www.youtube.com/watch?v=vnatyrn6DFE ). Ambos sobrevivieron, aprendamos sobre estas historias en estos momentos.

No sabemos cuándo, ni cómo, pero esto va a pasar y lo recordaremos como un sueño del que hablaremos por varias generaciones; como aquella madre que le regaló a su hijo un reloj que decía ESTO TAMBIÉN, PASARÁ. Para no olvidar que lo que habían sufrido juntos había pasado y que cualquier adversidad que viniera también pasaría.