No me llevo con mi jefe, no lo entiendo y no confío en él. El está en otro país y lidera nuestra región desde ahí. Hablamos exhaustivamente en una teleconferencia respecto a un tema estratégico, acordamos el manejo, pero luego, hace algo completamente diferente. No me siento cómodo porque no sé donde estoy parado con él.
Entender cómo navegar las relaciones de poder e influencia en un ambiente incierto y ambiguo puede generar mucho estrés. Nadie nos prepara para esto, no hay maestría, posgrado ni carrera universitaria –tampoco un libro- que nos haga sentir competentes frente a una situación como la descrita. La persona puede sentir que puede perder su trabajo y su credibilidad profesional sino maneja bien la situación, y su percepción es la correcta.
El abordaje de este caso, consiste en:
a) Aprender a descifrar las reglas no escritas de la organización, las reglas que aplican a los niveles superiores, lo que denominaremos el aprendizaje de las relaciones de influencia y poder. El protagonista de nuestro caso, debería darse a la tarea de entender, quiénes son las personas de confianza de su jefe, cuáles son sus perfiles y cómo funcionan grupalmente, antes de tomar al pie de la letra cada conversación que tiene con él.
b) A nivel individual, hay que trabajar en entender las motivaciones y saboteadores inconscientes y que puedan estar jugándonos en contra sin darnos cuenta, es decir desarrollar mayor conciencia de uno mismo. No es fácil, porque implica ser actor de nuestra película y a la vez espectador. En el caso descrito arriba, pudiera ser que la persona (el protagonista) bajo mucha ansiedad, se comporta inadecuadamente, y el jefe, que tiene un problema para confrontar, lo deja pasar, pero luego actúa de acuerdo a su propio plan.
c) Finalmente, no con teorías conspiratorias, sino con datos objetivos, hay que tratar de descubrir cuáles son las motivaciones de las personas importantes en el sistema: superiores, pares y subordinados. Puede ser que la motivación del jefe sea el reconocimiento, y la propia, el logro, y puede ser que ambas motivaciones, no sean compatibles, ¿cómo conciliarlas? La conciliación creativa significará el éxito en la relación y en la ejecutoria mutua.
El trabajo para abordar una situación de este tipo incluye análisis estratégico, análisis de influencias & relaciones de poder y desarrollar conciencia de uno mismo.
Este trabajo, se puede hacer solo, pero es complejo, por la sencilla razón, que todos tenemos puntos ciegos, es decir, elementos de nosotros mismos, que no nos son evidentes, además, cuando estamos bajo estrés, no vemos claro nuestro entorno, ni nuestras relaciones, tendemos a sentirnos amenazados y a no mostrar nuestra mejor versión, lo que puede agravar una situación como la descrita arriba.
Casos como el anterior, me llevaron a buscar información respecto a cuáles son los dilemas principales de los líderes en el mundo hoy. ¿Qué encontré?
En una encuesta llevada a cabo con más de 200 coaches de alto nivel con prácticas en diversas partes del mundo, se encontró que los retos más comunes de los líderes (sus clientes), tenían que ver con manejar la volatilidad, la incertidumbre y la complejidad. Con frecuencia éstos líderes trabajan matricialmente -donde cada individuo reporta a más de una persona -en una organización global en un ambiente donde muchas de las interacciones se dan de manera virtual.
De acuerdo al Instituto Korn Ferry que publicó el estudio Coaching for the 21st Century, los retos más importantes del líder que abordan los coaches de alto nivel hoy son:
- Tener conciencia de uno mismo (patrones de pensamiento y accionar bajo presión y estrés que pueden perjudicarlo a uno sin que nos demos cuenta).
- Desarrollar empatía y lograr ser exitoso en cultivar, desarrollar y mantener relaciones personales y habilidad de escucha en un contexto laboral complejo.
- Entender y navegar las relaciones de influencia sin perder coherencia y autenticidad con uno mismo.
- Liderar a una organización, equipo o departamento durante tiempos de mucho cambio e incertidumbre.
- Tener habilidades de comunicación oral y escrita.
- Motivar, liderar y mantener equipos con visión y propósito aún pese a tiempos difíciles y en tiempos de escasez de talento.
- Construcción de equipos efectivos de alto desempeño.
- Desarrollar pensamiento estratégico.
- Capacidad de tomar decisiones con ambigüedad y volatilidad.
- Identificación, acompañamiento y desarrollo de líderes que sean consistentes con los planes de sucesión de la organización y con su mejor visión individual de ellos mismos.