Las pequeñas y medianas empresas (pymes) son la columna vertebral de la economía. Según el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo (MEIC), las pymes conformaban cerca del 97% del parque empresarial costarricense. De acuerdo con datos de la Dirección Actuarial y Económica del Área de Estadística CCSS, las pymes en Costa Rica emplean al 24% de las y los trabajadores costarricenses.
Las pymes, además de desempeñar un papel fundamental desde el punto de vista económico, juegan un papel social y cultural que es esencial. Su bienestar y supervivencia es fundamental para millones de familias costarricenses, para la innovación y el dinamismo de la economía. Sin embargo, la crisis del covid-19 las ha golpeado particularmente. Como resultado de la reducción de la demanda y los desafíos en la oferta de materias primas, entre otros problemas, muchas empresas se vieron obligadas a reducir la producción y el empleo, y atravesaron por serios problemas de liquidez. Durante los períodos más restrictivos de la pandemia, las microempresas fueron las que sufrieron una mayor caída en sus ventas: El 54% de ellas reportó una disminución que oscilaba entre un 75 y un 100 %.
Lo sorprendente es que, a pesar estos tiempos retadores, en Costa Rica el emprendimiento no se detuvo: un buen termómetro de la actividad empresarial del segmento son los datos que ofrece Correos de Costa Rica en su servicio de envíos especializado Pymexpress. La afiliación al servicio de mensajería para pequeños negocios pasó de 4.200 empresas a más del doble, contabilizando 10.200 en 2020. Asimismo, los envíos realizados por las pymes afiliadas registraron un aumento del 154% comparados con el año anterior. Estos datos demuestran el impresionante espíritu emprendedor y resiliente del costarricense y de su enorme adaptabilidad y creatividad ante los tiempos desafiantes que atraviesan.
La tecnología ha jugado un papel fundamental en el fortalecimiento de las Pymes y en la creación de mayores oportunidades, pues estas empresas se han visto obligadas a reinventar la forma en que empoderan a sus empleados, involucran a sus clientes, optimizan sus operaciones y transforman sus productos para mantenerse competitivas. Para conseguirlo, para adaptarse y reinventarse, se han apoyado en la transformación digital.
Empoderar e impulsar este ímpetu emprendedor es fundamental para el progreso económico, para el bienestar social y la lucha contra el desempleo y la pobreza.
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Microsoft sabe del esfuerzo y de la resiliencia que las pymes han tenido ante esta coyuntura y ha creado ofertas específicas para ayudar a todos los costarricenses y a todas las organizaciones a superar los desafíos de la pandemia. Lanzó Digital Native Companies, un programa enfocado en las necesidades de digitalización y desarrollo especial para las pymes y emprendimientos de base digital que busca ayudarlas a responder, recuperarse y reimaginar sus negocios en la economía digital para impulsar su crecimiento.
También ofrece a los emprendedores y pequeños empresarios asesoría, un catálogo de soluciones tecnológicas capacitación digital para adquirir nuevas habilidades y conexiones con los socios de negocio de Microsoft. Mediante esta apuesta por su transformación digital, las empresas podrán reinventar sus objetivos y estrategias de negocios que les permitirán seguir siendo competitivas y protagonistas de la recuperación económica.
En Costa Rica, las alianzas estratégicas han permitido ser un impulso para todas las Pymes. Un ejemplo de ello es la alianza de Microsoft y kölbi que crearon una iniciativa conjunta para promover la innovación y la digitalización en medio de la pandemia. Gracias a esta alianza, los pequeños empresarios encuentran una solución integrada con más de 20 aplicaciones diseñadas y enfocadas en el aumento de la productividad, incremento de trabajo en equipo y comunicación, trabajo colaborativo con todas las características de seguridad y privacidad que requiere proteger uno de los activos más valiosos de las empresas hoy en día: los datos.
La apuesta por la tecnología
Lo cierto es que, en un contexto económico incierto, la inversión en tecnología genera ventajas competitivas reales y mejoras en la productividad. Un estudio de Microsoft reveló que, en la región latinoamericana, 9 de cada 10 Pymes consideran que la adopción de nuevas tecnologías es importante para la reactivación de su empresa, 3 de cada 4 indicaron que sus negocios se reinventarán a partir de la incorporación de nuevas tecnologías, y 7 de cada 10 está capacitando a sus empleados en ellas. Apalancados en la tecnología, los emprendimientos tuvieron la oportunidad de replantear modelos de negocio, llegar a nuevos clientes y mercados, optimizar sus procesos y ahorrar costos.
Aquellas empresas que habían avanzado en esta transformación pudieron reaccionar, generar resiliencia, optimizar operaciones, llegar a sus clientes y a nuevos mercados. Las de mayor madurez digital tuvieron claras ventajas sobre su competencia. Según el Foro Económico Mundial, las empresas que invierten en el uso tecnología como Robótica, IoT, Servicios Cognitivos podrían aumentar su productividad hasta tres veces.
Aunque esta velocidad y la intensidad de transformación pueden resultar vertiginosas para las pymes, lo cierto es que las respuestas son más sencillas y accesibles de lo que aparentan. La computación en la nube ha tenido un gran efecto democratizador y ha puesto al alcance de cualquier empresa, de cualquier tamaño o sector, los mismos servicios que antes estaban al alcance solo de las grandes corporaciones.
Sin embargo, aún subsisten algunos mitos con respecto a la digitalización. El primero es el mito del costo: se cree que la Inteligencia Artificial, Big Data, IoT y la nube, solo son accesibles para las grandes empresas debido a su costo de implementación. Sin embargo, el uso de la nube ha democratizado el acceso. Más de 200 soluciones de tecnología de punta, como Machine Learning, IoT o Inteligencia Artificial, existen como servicios que están listos en la nube de Azure y se pagan sólo por consumo. En la nube, cualquier Pyme puede acceder a soluciones de primer nivel ahorrando grandes inversiones de capital y evitando tener capacidad ociosa que solo se use durante los picos de demanda. Estos servicios se pueden activar una vez, para un proyecto específico, o de manera permanente, a la medida de las necesidades.
Existe también el mito de que la tecnología solo permite crecer a las empresas con base tecnológica. Nada más lejano a la realidad. La cuarta revolución industrial permite a los negocios de todos los rubros a transformarse. Toda empresa, independientemente de su tipo y tamaño, puede incorporar tecnología.
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Es cierto que los nuevos emprendimientos nacieron en buena medida en la era digital y ya incorporan en su ADN el poder de los datos, la computación en la nube para llegar a sus clientes y operar sus negocios, lo cual les da una ventaja competitiva. Pero, las Pymes más tradicionales, que están en pleno proceso de transformación, tienen también oportunidades accesibles y opciones de ponerse a tono con un mundo cada vez más digital y global, para maximizar las capacidades de las personas y organizaciones, hacer más con menos aprovechando la tecnología para automatizar tareas, administrar más eficientemente y dar un valor humano al trabajo, donde los colaboradores pueden centrarse en lo que de verdad importa.
Los siguientes pasos
El siguiente paso en este trayecto de transformación es la inclusión de la Inteligencia Artificial (IA) en los entornos de las pymes para ayudarles a ser digitales. Es una herramienta estratégica para que las empresas crezcan y para la expansión económica de la región. La IA ayuda a democratizar el acceso a los datos, por lo que las empresas de todos los tamaños pueden ofrecer experiencias más inteligentes, personalizadas y predictivas a sus clientes. Ya lo vemos con el uso creciente de:
· Chatbots para un servicio al cliente más atractivo, están ayudando a atraer clientes mientras automatizan el soporte de clase mundial y quitan parte de la carga de trabajo de los recursos del personal de soporte.
· La Inteligencia de datos, gracias al uso de big data, análisis e inteligencia empresarial inteligente (BI) permite a las pymes acceder a nuevos datos, predecir tendencias y realizar un seguimiento del rendimiento en tiempo real. Gracias a esto, pueden estar en igualdad de condiciones con las grandes empresas.
· El Internet de las Cosas (IoT): las pequeñas empresas pueden ahorrar dinero mediante el uso de tecnologías de IoT para supervisar el uso de recursos, aumentar la productividad a través de la automatización, gestionar mejor su riesgo y supervisar las operaciones.
Finalmente, con la democratización de la tecnología gracias a los servicios de computación en la nube, las dificultades de acceso han ido derribándose y haciéndose más accesibles a todos los negocios, de cualquier tamaño o sector. Sin embargo, uno de los grandes obstáculos que aún quedan por vencer es el de las habilidades, pues de nada sirve tener acceso a la tecnología, si las empresas no tienen cómo implementarla por falta de talento.
Así pues, uno de los pasos clave necesarios para fomentar una recuperación económica segura y exitosa es ampliar el acceso a las habilidades digitales necesarias para ocupar nuevos puestos de trabajo que habiliten la transformación, y una de las claves de una recuperación genuinamente inclusiva son los programas para proporcionar un acceso más fácil a las habilidades digitales para las personas más afectadas por la pérdida de empleos, incluidas aquellas con menores ingresos, mujeres y minorías sub representadas.
El objetivo de Microsoft es ayudar a que el aprendizaje técnico sea aún más accesible para todos los que quieran adquirir una nueva habilidad, perseguir una nueva trayectoria profesional y mantenerse al día sobre los últimos avances tecnológicos. Para ayudar a abordar estas necesidades, Microsoft lanzó el 30 de junio de 2020 una iniciativa global de habilidades destinada a llevar más habilidades digitales a 30 millones de personas en todo el mundo.
Durante la pandemia, más de 62,000 costarricenses se entrenaron en las rutas de aprendizaje de la iniciativa Global Skilling de Microsoft, capacitándose en servicio al cliente, desarrollo de software y Sporte de TI/Sporte técnico, contribuyendo a cerrar la brecha de habilidades digitales, para que nada frene la transformación y la recuperación económica del país. El bienestar y la prosperidad de millones de costarricenses dependen de ello, y no puede haber bienestar si no se brinda acceso a las habilidades.