El Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil creció 0,4% en el tercer trimestre con relación al anterior, a un ritmo menor al esperado por el mercado, informó el jueves el instituto brasileño de estadística (IBGE).
En el acumulado de este año, la mayor economía de Latinoamérica creció 3,2%, comparada con el mismo periodo de 2021.
La recuperación de la economía brasileña perdió ritmo, impactada por una política monetaria más restrictiva tras el aumento de la tasa básica de interés (Selic), ubicada a 13,75% desde agosto de este año, y complicaciones en el escenario externo, marcado por la guerra en Ucrania.
El PIB brasileño se había expandido 1% en el segundo trimestre respecto al anterior, luego de avanzar 1,3% en el primero, según datos revisados.
El resultado entre julio y septiembre está por debajo del crecimiento esperado en 0,6%, por unas 75 instituciones financieras y consultoras, de acuerdo con la mediana calculada por el diario económico Valor.
"El crecimiento fue impulsado especialmente por los servicios, que responden por el 70% de la economía, destacándose servicios presenciales como el alojamiento y la alimentación", explicó Rebeca Palis, coordinadora de cuentas nacional del IBGE.
Los servicios crecieron 1,1% y la industria se expandió 0,8%. En tanto, la agropecuaria se achicó 0,9%, según Palis debido a una caída en la producción de cultivos como la caña de azúcar y la mandioca.
"A pesar de la política monetaria, el consumo de las familias contribuyó positivamente (al PIB), impulsado por una mejora en el mercado de trabajo, la desaceleración de la inflación en 12 meses, el crecimiento del crédito y los auxilios gubernamentales, como el (programa asistencial) Auxilio Brasil", destacó.
El mercado proyecta una expansión de 2,8% del PIB este año, al cierre del mandato del presidente ultraderechista Jair Bolsonaro, según la última encuesta Focus del Banco Central de Brasil (BSB).
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