El Gobierno y el sector industrial procuran encontrar un balance entre la importación y la producción nacional de granos básicos.
En los últimos cinco años, se ha comprado al exterior más de $1.254 millones en frijoles negros, arroz, maíz amarillo y blanco, lo que representa más de 3,8 millones de toneladas métricas en granos.
El Gobierno busca, desde la perspectiva de la soberanía alimentaria, una estrategia de mejora de rendimientos y productividad, para que Costa Rica pueda generar un mayor porcentaje de algunos de estos productos.
Según el ministro de Agricultura y Ganadería, Luis Felipe Arauz, se intenta disminuir la factura de importación como país y la dependencia que se tiene de los mercados internacionales en estos alimentos estratégicos.
Arroz y frijoles
Anualmente en Costa Rica se consumen 49.200 toneladas métricas de frijol, 4.100 por mes, según datos del Consejo Nacional de Producción.
En cuanto al arroz, los datos de la Corporación Arrocera Nacional indican que el consumo del año pasado en el país fue 224.369 toneladas métricas de arroz pilado, equivalente a 340.000 granza, y un consumo per cápita de 48,07 kilos de este grano.
El promedio de compra en el último lustro de frijoles negros es de 39 toneladas métricas, y en lo respecta al arroz (en granza, pilado y partido) es de 100,28 toneladas métricas, a un costo de más de $390 millones sumados ambos alimentos básicos.
Empero, ha sido el arroz el que presentó una tendencia al alza, con un crecimiento de un 46% en los últimos tres años, mientras el frijol se mantuvo con un comportamiento constante.
Los precios internacionales de frijol varían constantemente y son muy sensibles a factores climáticos y a la oferta y demanda mundiales.
En este momento, los precios del frijol negro promedian los $950 por tonelada métrica y los de frijol rojo los $1.500 por tonelada métrica, explicó Jorge Chaves, tesorero de la Cámara Nacional de Industrializadores de Granos (Caningra).
Para Chaves, el tema de incrementar la producción nacional de frijoles requiere de mucho análisis y se debe revisar con lupa, pues un incremento sustancial en los volúmenes, lejos de ayudar al productor nacional, podría perjudicarlos.
Alega que no existe la capacidad de almacenaje ni de recibo para poder comprar un mayor volumen durante los meses de marzo y abril. Además, tener varios tratados de libre comercio que permiten el ingreso de frijoles sin pagar aranceles podría poner en desventaja al productor tico.
Por otra parte, Conarroz busca pasos firmes con miras a la autosuficiencia o, al menos, a un mayor balance de precios. Minor Barboza, director ejecutivo de Conarroz, explicó que trabajan en el Programa Nacional de Arroz 2014-2021, en el cual el sector busca rendimientos más altos para los productores nacionales.
Barboza explicó que pretenden desarrollar un mecanismo en busca de un balance: 60% de producción nacional y 40% de importación del grano.
Actualmente, un 18% de ese 40% es importado por el sector industrial mediante el contingente del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos. El restante son importaciones de arroz pilado de terceros que no forman parte de Conarroz, y según Barboza ponen en desventaja al productor nacional.
Barboza dijo que el sector industrial planteó una salvaguardia ante el Ministerio de Economía para que el Gobierno declare desabastecimiento y se importe el total del 40% por contingente, no para cerrar el espacio a los terceros, sino tras un mayor balance en los precios.
Inversión en compras de granos al exterior en el último lustro.
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