Banca de desarrollo espera oxígeno

Traslado de peaje bancario salvaría sistema del ahogo; MEIC prevé votación de cambios en dos meses

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Cuatrocientos millones de dólares tienen más de dos años y medio de dormitar en las cuentas de Bancrédito.

Allí llegaron provenientes del peaje de un 17% que se le cobra a la banca privada por los depósitos en cuentas corrientes desde hace 16 años.

Duermen pese a que el Sistema de Banca para Desarrollo (SBD) les puso el ojo desde el principio para oxigenar créditos para pequeños y medianos emprendedores, que encuentran cerradas las puertas de la banca comercial para sus proyectos por carecer de garantías.

Sin embargo, ha sido imposible que los bancos privados y el Estado se pongan de acuerdo en un mecanismo para operativizar el millonario peaje.

Es hasta ahora que una comisión especial de la Asamblea Legislativa explora los mecanismos para sacarle provecho a ese dinero, con el fin de que vigorice permanentemente al Fideicomiso Nacional de Desarrollo (Finade).

Patricia Pérez, diputada del Movimiento Libertario que preside la comisión especial de Banca para Desarrollo, afirmó que en dos semanas el Congreso tendrá lista una reforma a la ley del SBD donde se darán respuestas al fondeo del Finade.

Nueva visión

Para que eso ocurra, la comisión planea proponerle al Plenario que la tasa del peaje se reduzca a un 15%, siempre que los intermediarios financieros hagan los depósitos en colones.

Esto porque el Parlamento pudo determinar que los microcréditos en dólares no son apetecidos por las pequeñas y medianas empresas costarricenses.

“Creemos que sobre esos dineros del peaje se deben pagar tasas de interés mínimas y así fomentar que esos recursos se coloquen rápido entre empresarios, los que están urgiendo para hacer crecer sus negocios”, dijo Pérez.

Los cambios al SBD llevan implícita la polémica.

Pero la libertaria tiene esperanzas de que en esta ocasión los diputados puedan sacar avante la reforma para que el sistema no se ahogue por falta de oxígeno.

Eso ocurriría en unas dos semanas.

Una vez armado, el nuevo texto del proyecto de reforma deberá ser remitido en consulta a varios sectores como el bancario y el empresarial.

Según Mayi Antillón, ministra de Economía, Industria y Comercio (Meic), la expectativa es que el proyecto de reforma al SBD esté listo en ese plazo, con el fin de que Casa Presidencial lo convoque entre sus prioridades para el próximo periodo de sesiones extraordinarias, que se iniciará el 1° de diciembre.

Según Antillón, el plazo cuatrienal de la anterior comisión de banca para desarrollo feneció porque el fallido plan fiscal pasó a ser una prioridad del Poder Ejecutivo, que consumió cerca de un año de labor legislativa.

La ministra, sin embargo, negó que el Gobierno tenga desinterés en la implementación de nuevos mecanismos para financiar a los pequeños y medianos emprendedores y las personas de escasos recursos que deseen iniciar un negocio para su subsistencia.

Un milagro posible

La jerarca ve más posible que nunca un acuerdo entre todos los sectores que permita al SBD echar mano de los recursos del peaje bancario.

En el pasado, Antillón propuso que el peaje se ejecutara a través de la creación de un canon sobre la banca privada, idea que no fue bien recibida ni por los diputados ni por los banqueros.

Pese a que son varios los nudos que atan al SBD, la ministra piensa que lo verdaderamente urgente es desatar aquellos lazos que impiden que los recursos fluyan al Finade, pues de ahí se alimenta el Fondo de Avales y Garantías del que echan mano los pequeños empresarios que carecen de respaldos para obtener los créditos.

Según Miguel Aguiar, director del SBD, se espera cerrar el 2012 con una colocación de ¢16.000 millones. A finales de setiembre se habían logrado colocar ¢10.483 millones.

El jerarca detalló que con el fin de aumentar la colocación de recursos, el SBD incursionó en la oferta de productos financieros complementarios como el leasing y el factoreo, además de los avales para renovación de la flotilla de taxis y para facilitar a las Mipymes llevar a cabo procesos de contratación con el Estado.

Éxito a medias

La vicepresidenta ejecutiva de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), Martha Castillo, consideró que el SBD ha tenido éxito a medias por la dificultad que deben enfretar las pymes y los nuevos emprendedores para tener acceso a fondos específicos.

La jerarca empresarial afirmó que durante el actual gobierno se ha tratado de corregir ese aspecto con la creación de líneas de crédito para sectores específicos, como el nuevo producto que se lanzó en convenio con el Banco Nacional (BN) para financiar ideas empresariales de 1.400 pequeños industriales que ahora contarán con ¢7.000 millones a su disposición.

“El sistema ha sido muy exitoso en cuanto a la entrega de avales por parte del Finade, pero hay una compleja tramitomanía para que los emprendedores accedan a los recursos”, manifestó.

Castillo considera que otro de los obstáculos por eliminar es la imposibilidad de que empresas que no tienen créditos con el SBD puedan optar por los servicios de desarrollo empresarial no financieros que, por ahora, solo están disponibles para quienes obtuvieron recursos del sistema.

La supervisión diferenciada por parte de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef), y la incorporación del concepto de microfinanzas dentro del SBD siguen siendo deudas, según Castillo.

Mas esos otros temas no figuran dentro de la agenda de debate de los diputados.

El Parlamento está concentrado en encontrar de una vez por todas un mecanismo para despertar los cientos de millones de dólares que aún no sirven para dar vida a miles de emprendimientos. Mientras tanto, muchas ideas seguirán esperando una oportunidad para empezar a respirar.

Líneas del cambio

Los diputados tienen la mira puesta en los siguientes puntos del SBD:

Peaje: La tasa bajaría a un 15% para incentivar los depósitos en colones. Se pagaría una tasa de interés menor para colocar rápido los recursos.

Fondeo del Finade: Se pretende analizar la conveniencia de cobrar impuestos a los bancos de maletín y trasladar recursos ociosos del INA.

Calificación de riesgo: Bastaría con que el emprendedor no tenga su hoja de crédito manchada para que sea sujeto de crédito en el SBD.

Sectorización: Se crearían productos financieros específicos para sectores con características diferentes.

Regulación: Se optaría por una regulación especial y específica basada en criterios y parámetros según características particulares del SBD.

Fuente Plan de reforma al SBD.