Cambios demográficos y expropiaciones complican política pública de vivienda

Según ministro del ramo, país debe apostar por soluciones habitacionales en edificaciones verticales

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Menos hijos, composición diferente de las familias y envejecimiento de la población son algunos de los cambios en la demografía costarricense, que junto con un complejo mecanismo de expropiaciones, dificultan el desarrollo de una política pública de vivienda.

De esta opinión es Rosendo Pujol, ministro de Vivienda, quien participó este lunes en un foro sobre la accesibilidad de la clase media a la compra de vivienda, en ADN Radio 90.7 fm.

El funcionario explicó que la fuerte demanda de vivienda no se sostendrá por más de 15 años, por lo que la política de vivienda no es fácil de diseñar.

Según el ministro, hacen falta cifras nuevas o actualizadas sobre las necesidades habitacionales, el costo de la construcción y la disponibilidad de tierra, entre otras para que el Estado pueda tomar decisiones de política pública.

Las expropiaciones y la falta de tierras también son un obstáculo. "Este país no tiene planificación. La ley de expropiaciones 'es una barbaridad' en contra del Estado y a favor de los dueños de tierra", dijo.

Vivienda en las alturas

En el foro, en el que también participaron representantes del sector construcción, se perfiló la necesidad del país de enrumbarse hacia el desarrollo de más viviendas en edificios de apartamentos.

"La política de vivienda tiene que apostar hacia edificaciones de altura. El paso que hay que dar es saltar es hacia los apartamentos", comentó Pujol.

Sobre este tema, Guillermo Carazo, presidente de la Cámara Costarricense de la Construcción, opinó que en los costarricenses comienza a calar más una "cultura metropolitana". Ejemplo de esto es la oferta en las ferias de vivienda, cuya composición en la oferta ya se acerca al 50% horizontal y 50% vertical.

De acuerdo con los registros del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos, en el 2013 se autorizaron 27 condominios horizontales y 50 edificios de apartamentos superiores de más de tres pisos.

Altos costos

Gustavo Gutiérrez, de la firma consultora Gutiérrez y Gallardo, considera que en la actualidad muchos desarrolladores se concentran en la 'parte fácil' del mercado, que son las personas con ingresos superiores a los $2.500 (cerca de ¢1,3 millones).

Esta característica la fundamentan los desarrolladores en los costos de construir los inmuebles. De acuerdo con la Cámara de la Construcción, Costa Rica tiene costos de construcción altos, pues la mano de obra representa un 30% del desarrollo.

No obstante, el ministro de Vivienda, opinó que la oferta de soluciones habitacionales no es siempre realista.

"También los desarrolladores ofrecen cosas que la población no necesita. No todas las familias necesitan tres habitaciones, ni dos estacionamientos", dijo Pujol.

Los participantes en el foro coincidieron en que el país debe crear nuevas alternativas de diseño (número de habitaciones) y de producto, como la de entregar el inmueble en obra gris. En esto también deben participar las entidades financieras, con productos como los 'leasing' o arrendamientos con opción de compra.

"Hay que crear una variedad desde el desarrollador y buscar al cliente que gana unos ¢800.000" dijo Gutiérrez.

Pujol también enfatizó que el alquiler de vivienda tampoco debería ser visto como un mal.

"Yo creo que alquilar vivienda tampoco es pecado. (...) No podemos satanizar una opción de vivienda por tener una obsesión con la otra", dijo.