El déficit fiscal de Estados Unidos bajó con fuerza en octubre, primer mes del ejercicio fiscal 2014, indicó este miércoles el Departamento del Tesoro de ese país.
La cifra se ubicó en $91.600 millones, lo que representa una caída del 23,7% con relación a octubre del año pasado.
Esto confirma la tendencia en los últimos meses a la baja del déficit.
En el curso del año fiscal 2013 –que cerró en setiembre– el déficit fiscal estadounidense cayó cerca de 38% en cifras interanuales, por el impacto de un alza de los impuestos y de recortes automáticos en los gastos públicos.
Ese porcentaje fue la disminución más fuerte sufrida en los últimos 45 años.
La misma tendencia se mantiene en octubre.
En un año, los gastos del Estado federal disminuyeron 4,5% para ubicarse en $290.500 millones, en especial por los sectores de defensa (-8%) y educación (-29%).
En el mismo período, los ingresos fiscales aumentaron 8% en cifras anualizadas, a $199.000 millones, impulsados sobre todo por un alza de 14% de lo recaudado por impuestos a las empresas, según el Departamento del Tesoro.
Estados Unidos acaba de salir de una grave crisis presupuestaria que paralizó parcialmente la administración por dos semanas desde la primera mitad de octubre y amenazó con provocar una suspensión de pagos del país.
Republicanos y demócratas retomaron las negociaciones que deben conducir de aquí al 15 de enero a un acuerdo sobre el financiamiento del Estado federal en 2014.
En caso contrario, el gobierno se verá forzado a proceder a recortes masivos de sus gastos.