A pesar de las elevadas expectativas que hubo al principio, el presupuesto del 2015 saldría de la Comisión de Asuntos Hacendarios con recortes por el orden de los ¢85.000 millones.
Atrás quedaron mociones de varias fracciones legislativas para subir hasta los ¢300.000 millones las disminuciones efectivas en los gastos del Gobierno Central para el año entrante.
Tampoco prosperó la opinión de la Contraloría General de la República (CGR), que cifró en ¢200.000 millones el monto que se podría recortar del presupuesto por ¢7,9 billones, que es el aproximado que el Gobierno no logra ejecutar anualmente.
Ottón Solís, diputado del Partido Acción Ciudadana (PAC) y presidente de la Comisión de Asuntos Hacendarios, impulsó en solitario una reducción de ¢307.000 millones en el conjunto de partidas que no prosperó.
No obstante, Solís reconoció que la disminución real de ¢85.000 millones que aceptó el Gobierno al menos es más que los ¢61.000 que el Poder Ejecutivo había aceptado cortar al principio.
Por su parte el diputado Rolando González, quien representa al Partido Liberación Nacional (PLN) en el panel de Hacendarios, prevé que la disminución real del presupuesto será de ¢100.000 millones.
Durante la recta final del debate del presupuesto 2015 en la Comisión de Asuntos Hacendarios también se despejó el panorama para el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES).
Rolando González adelantó que las bancadas no tocarían el presupuesto de ¢410.000 millones para financiar la educación superior, que aumentó en ¢51.000 millones con respecto al 2014.
Asuntos Hacendarios tiene tiempo de dictaminar el presupuesto para el año entrante hasta el 20 de octubre a la media noche.
Posteriormente el plenario tendrá plazo hasta el 30 de noviembre para votar el proyecto de ley en segundo debate y final.
Antes, si una mayoría calificada de diputados así lo acuerda, el plenario se puede convertir en comisión general (mediante la aprobación de una moción) para efectuarle más cambios al presupuesto.