Dispositivos médicos son el motor de las exportaciones de alta tecnología

Exportaciones de dispositivos médicos alcanzaron $1.500 millones en el año 2012 y han crecido dos veces más rápido que el resto de las exportaciones de bienes en Zona Franca

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Gran parte del éxito en los últimos años de exportaciones de alta tecnología se debe a la manufactura de dispositivos médicos. Datos de la Coalición Costarricense de Iniciativas de Desarrollo (Cinde) muestran que actualmente Costa Rica es el segundo exportador más importante de dispositivos médicos en Latinoamérica, solamente superado por México.

En el quinquenio desde el 2009 al 2013, el promedio anual de inversión extranjera directa realizada por el sector de dispositivos médicos alcanzó $252,6 millones, superando en 55% al sector de electrónica, de acuerdo con cifras recientes del Banco Central.

Según Cinde, el crecimiento en este tipo de exportaciones se da gracias a que en el país se han impulsado estrategias que buscan eficiencia, mejoramiento de procesos y diversificación de productos. Además, una mayor complejidad y especialización de este sector.

Dentro de los instrumentos más sofisticados se encuentran los creados para controlar padecimientos cardiovasculares producidos por St. Jude Medical y Abbott Vascular; dispositivos para aplicaciones estéticas fabricados por Allergan; instrumentos ortopédicos de Arthrocare; de gastroenterología y urología manufacturados por Boston Scientific y otros dedicados a la salud de la mujer a cargo de Hologic.

Auge en el sector

En Costa Rica hay más de 51 empresas instaladas que han promovido el desarrollo de un capital humano con habilidades específicas para este sector y ha atraído proveedores de componentes y servicios sofisticados.

El auge del sector se ha visto en las cifras de las exportaciones de dispositivos médicos que alcanzaron $1.500 millones en el año 2012 y han crecido dos veces más rápido que el resto de las exportaciones de bienes en Zona Franca.

Se espera que para el 2016 las ventas hacia el extranjero de este tipo ocupen el primer lugar dentro de las exportaciones industriales de Costa Rica.

Este sector da empleo directo y formal a cerca de 16.000 personas, convirtiéndose en el sector de alta tecnología que más empleo genera en el país.

También genera un impacto importante en el derrame de conocimientos, ya que la mayoría de los responsables de las empresas multinacionales que operan en el país son ingenieros costarricenses que acumularon conocimientos trabajando alguna vez en las empresas pioneras de este sector en Costa Rica.

Esta industria inició su desarrollo en 1987 con la instalación de Baxter dedicada a la fabricación de sistemas para administrar medicamentos por vía intravenosa.