De 1991 al 2013, ninguna otra gestión gubernamental ha gastado tanto como la de Laura Chinchilla, la presidenta saliente.
Medido como porcentaje de la producción nacional, el gasto promedio del Gobierno Central del 2010 al 2013 asciende a 16,89%, según estimaciones realizadas por EF. Se excluye el pago de intereses, ya que tal monto puede mezclar endeudamiento de gobiernos pasados.
El mayor pico de egresos en el presente mandato llegó a 17% del PIB, registrado en 2010, 2012 y 2013.
Tal cifra pone al actual gobierno como el de mayor gasto, superando a la segunda gestión de Oscar Arias Sánchez, la cuál ostentaba tal marca.
Debe tenerse claro que el gasto no implica, necesariamente, un completo desperdicio de dinero. Tal indicador está compuesto por los gastos de capital (compra y producción de activos), las tranferencias realizadas a instituciones, las remuneraciones pagadas a los funcionarios públicos, el pago de intereses y el gasto en bienes y servicios.
La siguientes gráficas muestran la comparación del gasto promedio de las últimas seis gestiones y a lo largo de los últimos 23 años. La segunda gráfica presenta el comportamiento del déficit fiscal en el mismo plano del gasto:
Es injusto, claro, hablar simplemente del comportamiento del gasto total e ignorar en qué se han incrementado tales egresos. Debe reconocerse que Laura Chinchilla ha sostenido la tendencia de crecimiento en la inversión social per cápita en tiempos de crisis económica. Tal gasto está compuesto por lo invertido en educación, salud, protección social, vivienda y servicios recreativos, culturales y religiosos.
Para algunos, mantener esta inversión en momentos de déficit fiscal y baja recaudación tiene mérito, y puede explicar que los efectos de tal fenómeno global fueran menos dañinos que en otras naciones.
La siguiente gráfica muestra la evolución de ese indicador (no se encontraron datos del 2013):
Sin embargo, al hacer el balance final del gasto del Gobierno Central no puede ignorarse tampoco el creciente peso que han tenido las remuneraciones estatales como porcentaje de la producción, una tendencia que, eso sí, creció a mayor ritmo en la gestión de Oscar Arias que en la presente. Esta es una de las preocupaciones del actual Ministro de Hacienda, Edgar Ayales, según se puede leer en estas entrevistas realizadas por EF: parte 1 y parte 2.