El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) anunció la mañana de este viernes que un total de 102 observadores internacionales participarán en el proceso electoral del 2 de febrero.
La misión proviene de algunos países centroamericanos, República Dominicana, Puerto Rico, Santa Lucía, Perú, Brasil, Colombia, Ecuador, México, Paraguay, España, Estados Unidos, Argentina y Alemania.
Los observadores recorrerán los centros de votación de la zona norte y sur del país, así como del Área Metropolitana y lugares cercanos, indicó Javier Matamoros, encargado del Programa de Observadores Internacionales del TSE.
Matamoros detalló que el grupo tiene la potestad para llegar a visitar los centros de votación, recorrer todo el país e ingresar a los recintos para determinar el orden de la Juntas Receptoras de Votos.
"No pueden girar órdenes, ni intervenir en el proceso electoral. Tomarán nota y luego deben presentar un informe al TSE", dijo el funcionario.
El representante del Tribunal detalló que entre transporte, hospedaje y alimentación para ese grupo oficial, los costos serían cercanos a los ¢30 millones.
Algunos miembros de esa delegación ya se encuentran en el país. El grupo quedará completo el 30 de enero.
Matamoros indicó que días previos a los comisiones, los observadores se reunirán con los 13 candidatos a la Presidencia.
Aparte de esa delegación, el TSE contará además con 124 personas que conforman el grupo de observadores nacionales. Ellos pertenecen a la Fundación para la Paz y la Democracia, al Colegio de Profesionales en Ciencias Políticas y a la Defensoría de los Habitantes.
Durante la conferencia de este viernes, el presidente del TSE, Luis Antonio Sobrado, aprovechó para recordar a los patronos no interferir en la libertad electoral de sus empleados.
Sobrado precisó que esta mañana ordenaron una medida cautelar contra la cadena de restaurantes Subway para que no distribuya mensajes de carácter político en sus colaboradores.
Lo anterior tras las denuncias presentadas durante esta semana relacionadas con un correo electrónico que aparentemente distribuyó Subway entre sus empleados donde recomendaba, supuestamente, no votar por el partido Frente Amplio.