El diario colombiano El Tiempo publicó una entrevista con la presidenta Laura Chinchilla, en la que informó que el polémico empresario colombiano Gabriel Morales Fallón habría negociado con la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) protegerlo y reubicarlo en Costa Rica a cambio de información sobre el narcotráfico y lavado de dinero.
También Morales habría negociado con la Fiscalía General Colombia y parte de este acuerdo sería protegerlo en el país.
Al consultársele sobre este caso, la mandataria dijo no estar enterada.
"De haber tenido la información requerida, esto nunca habría pasado y no estaríamos lamentando este incidente, porque simple y sencillamente nunca nos habríamos montado en ese aparato", dijo Chinchilla a El Tiempo.
Sobre si su viaje a Perú podría haber afectado su prestigio la presidenta de la República contestó.
"Me golpeó esta situación. Quienes me conocen en mi trayectoria, saben lo celosa que he sido frente a ofrecimientos de colaboración. Toca un elemento esencial en mi carrera política y en mi vida, que es enfrentar al crimen organizado. Esto es un golpe a la imagen ya no de la Presidenta, sino de Laura Chinchilla", añadió la mandataria.
Chinchilla, además dijo, que es escándalo es un intento de manchar su prestigio y podría ser una operación de rechazo a su plan de reformar la Constitución Política para permitir la extradición de narcotraficantes costarricenses a Estados Unidos.
Las declaraciones de Chinchilla se publicaron en el diario colombiano este miércoles, día en que la mandataria viajará a Cali, Colombia, para incluir al país en la Alianza del Pacífico. El viaje lo realizará en una aerolínea comercial.