Francia busca identidad de suicidas tras ataques de París mientras el resto de Europa extrema su seguridad

Medida se toma en medio de una crisis de refugiados que huyen del clima de guerra en Oriente Medio

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

La investigación sobre los atentados de París, que le han costado la vida a al menos 127 personas y heridas a casi 200, deberá primero determinar cómo pudieron coordinarse unos suicidas para perpetrar esas matanzas en nombre del grupo yihadista Estado Islámico (EI).

Los restos de los suicidas que se hicieron explotar en el boulevard Voltaire, en la sala de espectáculos Bataclan y en el Estadio de Francia, serán trasladados al Instituto de Medicina Legal.

Los investigadores esperan encontrar rastros de ADN o huellas que coincidan con la información disponible en el fichero nacional de autores de delitos.

El presidente francés, se comprometió a atacar sin piedad al grupo Estado Islámico luego que el grupo yihadista admitió que organizó los ataques más letales infligidos a Francia desde la Segunda Guerra Mundial.

En un comunicado, escrito en francés y árabe y publicado en internet, el EI se adjudicó la autoría de los ataques. La declaración se mofa de los ataques aéreos de Francia afirmando que "no sirven para nada, ni siquiera para proteger las podridas calles de París". El texto llevaba el logotipo del grupo y era similar a declaraciones previas del grupo.

François Hollande, quien declaró tres días de luto nacional y elevó la seguridad de la nación a su máximo nivel, calificó la matanza de "un acto de guerra que fue preparado, organizado y planificado desde el extranjero, con ayuda interna".

Temor vecino

Mientras tanto, los países de Europa central y del este aumentan sus medidas de seguridad. Una decisión que se toma en medio de la crisis de refugiados que afecta a la mayoría de ellos, por donde transitan a diario miles de personas que huyen de los conflictos de Oriente Medio.

Como ejemplo del temor en los países vecinos de que estallen similares en su territorio, el gobierno británico convocó a una reunión emergencia del grupo COBRA, que abarca los máximos dirigentes de sus agencias de seguridad nacional.

Italia también elevó al máximo su nivel de seguridad en lugares públicos y fronteras nacionales.

El primer ministro británico David Cameron dijo que hay británicos entre los muertos en París, pero se negó a dar detalles. Advirtió que el grupo Estado Islámico es una amenaza "que está evolucionando".

El Gobierno de Hungría, que en septiembre y octubre selló sus fronteras con Serbia y Croacia para detener el flujo de personas que buscan asilo en el norte de Europa, anunció que ha elevado la alerta de seguridad por amenaza terrorista.

"Hay que reforzar la protección del país y responder a este horrible ataque terrorista", dijo hoy el primer ministro húngaro, Viktor Orbán en la televisión pública M1.

El Gobierno de Eslovaquia, que al igual que el de otros países de la región es reacio a aceptar una cuota de reparto de refugiados en toda la Unión Europea (UE) anunció que arrestará a todo aquel que entre de forma ilegal al país.

"La seguridad se convierte en la prioridad absoluta", dijo el primer ministro eslovaco, Robert Fico.

En Bulgaria, la titular del Interior, Rumyana Bachvarova, anunció un aumento de las medidas de seguridad, incluido un reforzamiento del control en las fronteras de su país, pero sin cerrarlas.