Este miércoles comenzó el proceso de impresión de más 3.000.000 de papeletas para la segunda ronda electoral, que enfrentarán Luis Guilermo Solís, del Partido Acción Ciudadana (PAC), y Johnny Araya, de Liberación Nacional.
La fotografía de Solís se ubicará a la izquierda del documento y la de Araya a la derecha.
"El tiempo de impresión está previsto para que sean máximo tres semanas y mínimo dos. Con respecto a su apariencia, no tendrá muchos cambios, la única diferencia será el tamaño que vendría siendo la mitad de la papeleta anterior, como media hoja tamaño carta", explicó el director del Registro Electoral, Héctor Fernández.
El funcionario garantizó que los nuevos documentos contarán con las mismas medidas de seguridad y un talón numerado como en la primera vuelta.
El órgano electoral destinará alrededor de ¢51 millones para la impresión de los más de 3 millones de papeletas presidenciales, lo que corresponde a la cantidad de electores inscritos en el padrón electoral, exactamente 3.078.321 ciudadanos.
" Son un poco más de papeletas aparte de la oficiales. Se imprimen otras para muestras y otro porcentaje para contingencia", señaló Fernández.
A diferencia de elecciones de años anteriores el TSE decidió contratar a la empresa privada R.R. Donnelley para que efectaura la impresión de las papeletas presidenciales tanto en la primera ronda como en la segunda. El contrato se realizó el año pasado, según comentó Gerardo Abarca, el secretario general de la Direccción de Registro Electoral del TSE.
De acuerdo con Abarca, la empresa ofrece el sistema de rotativa Offset que es un método más moderno y que servirá mucho cuando se deberá de imprimir las papeletas de las elecciones municipales, en el 2016, en donde participarán cerca de 6.000 candidatos.
La impresión de las papeletas se realiza en Santo Domingo de Heredia. Una vez finalizado el proceso y realizado el control de calidad, el TSE prodecerá a trasladar la papelería a sus bodegas en el complejo de zona franca Las Brisas, en San Rafael de Arriba de Desamparados.
Agregó que tanto el proceso de impresión y empaque de las papeletas cuenta con un protocolo de seguridad constante y de monitoreo por parte de funcionarios del TSE, empleados de la imprenta y miembros de la Unidad de Intervención Policial de la Fuerza Pública.
Una vez lista la papelería, el Tribunal tiene programado iniciar con el proceso de empaque, que extendería por cuatro días.
Posteriormente, el TSE se encargará de distribuir los sacos con todo el material electoral a las juntas cantonales. Estas se encargarán de la distribución a las juntas receptoras de votos ocho días antes de las elecciones presidenciales.
Abarca dijo que las nuevas papeletas al ser más pequeñas que las de la primera ronda tendrán una trama de seguridad por el reverso para evitar que se vea la marca del candidato elegido.