Laura Chinchilla acepta renuncia del viceministro Mauricio Boraschi y de su asistente Irene Pacheco

Mandataria anunció que no utilizarán más aviones de empresas privadas

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La presidenta de la República Laura Chinchilla anunció esta noche que aceptó la renuncia del viceministro de la Presidencia, Mauricio Boraschi, y designó en su lugar al viceministro de Seguridad, Celso Gamboa. Su asistente personal, Irene Pacheco, también deja su cargo.

En una cadena de televisión que duró seis minutos, Chinchilla reconoció que Boraschi no cumplió a cabalidad con las medidas de seguridad que se le deben de garantizar a su persona, en referencia al uso de la aeronave que se utilizó el pasado fin de semana para el viaje a Perú.

Boraschi era el director de la Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional, y Comisionado Antidrogas, encargado de velar por el resguardo de la integridad física y moral de la Presidenta, además de corroborar, anticipar y evaluar las actividades en las que participa Chinchilla. "Estas tareas, en este caso, no se cumplieron", dijo la Mandataria, al tiempo que admitió que hubo imprudencia en cuanto al tema de seguridad.

Agregó que la situación puede comprometer al país que siempre ha dado la lucha frontal contra el narcotráfico y la delincuencia organizada.

"Fueron colaboradores cercanos y leales los que bajaron la guardia y eso no puede ser aceptado aquí y en ningún lado", dijo Chinchilla.

No más viajes en aviones privados

La Presidenta advirtió que en lo que resta de su administración, ni ella ni ningún funcionario público utilizará aviones de empresas privadas para realizar sus viajes a compromisos gubernamentales.

Delegó además en Celso Gamboa la tarea de revisar los protocolos de seguridad en Presidencia, de cara a los futuros viajes y giras a las que deba asistir Chinchilla, y dijo que en su Gobierno solo han tenido que recurrir cuatro veces al uso de aeronaves privadas para asuntos oficiales.

La Mandataria admitió que tras el escándalo internacional que provocó este caso, su Gobierno aprendió la lección de resguardar con mayor celo la institucionalidad del país.