El candidato del Partido Acción Ciudadana (PAC), Luis Guillermo Solís, propone en su programa de gobierno un plan de emergencia, para aplicar durante los dos primeros años de administración, para mejorar tanto el ingreso como el gasto público.
El plan de emergencia pretende entre otro lineamientos, revisar y ajustar temas como exoneraciones, consultorías, evasión fiscal y consolidar un presupuesto nacional por resultados.
Este plan se ejecutaría simultáneamente a una reforma fiscal progresiva que se plantearía en el Congreso mediante proyectos individuales que contengan diferentes impuestos. La idea de Solís es presentar por ejemplo, en proyectos separados, el Impuesto de Valor Agregado (IVA) y el impuesto sobre la renta, catalogados como prioritarios.
Según el candidado a la vicepresidencia por el PAC, el economista Helio Fallas, una reforma fiscal con proyectos separados es más viable de negociar con los diputados de oposición y obtener resultados positivos.
"Se ha demostrado que una reforma fiscal completa no pasa en la Asamblea Legislativa, porque mientras unos diputados están a favor de algo, otros están en contra de otro tema", dijo Fallas.
Solís presentó su programa bajo el titular "Plan rescate: trabajo, progreso y alegría", en las instalaciones de Pueblo Antiguo, donde anunció que repartirán en todo el país un total de 500.000 ejemplares para que los ciudadanos conozcan su propuesta.
El programa está conformado por 110 medidas prioritarias para "rescatar a Costa Rica".
Otros de los temas que aborda el plan tienen que ver con desarrollo y mejora de infraestructura, fortalecimiento del seguro de salud y las pensiones de la Caja del Seguro Social (CCSS), resguardo al productor nacional, garantizar una educación académica y técnica de calidad, implementar una gestión ambiental compatible con el desarrollo humano y fomentar una seguridad pública civilista y efectiva.