La intención del Ministerio de Hacienda de transformar el impuesto sobre las ventas en el impuesto al valor agregado (IVA) retará la capacidad de negociación de la cartera y de la fracción de diputados de Gobierno, ante las múltiples visiones que existen en el sector productivo sobre la nueva estructura del tributo.
EF consultó a ocho cámaras y representantes de sectores empresariales sobre cuál sería el IVA que estarían dispuestos a aceptar.
Si bien hay algunas coincidencias, la tónica es el disenso. Y todos los sectores piden que Hacienda al menos tome en cuenta sus visiones particulares.
¿Por qué reformar el impuesto?
El impuesto sobre las ventas es uno de los dos principales pilares recaudatorios del Gobierno.
Según datos de Hacienda, durante el 2013 ingresaron al erario público ¢1,1 billones por recaudación del tributo sobre las ventas.
El otro pilar es el tributo sobre la renta que el año pasado generó ¢1 billón al Gobierno.
La problemática que enfrenta el Ejecutivo en recaudación del impuesto sobre las ventas es que su tasa de crecimiento ha caído durante los últimos 10 años. gráfico “Pilar débil”.
Según Hacienda, la evasión del pago del impuesto sobre las ventas creció de un 2% del PIB en el 2010 a un 2,1% en el 2012.
Si bien aún no hay pistas sobre el proyecto de ley que propondrá el Poder Ejecutivo a los diputados, las autoridades hacendarias han hablado en el pasado sobre la necesidad de ampliar la base impositiva de ventas para sumar a la prestación de servicios.
Tampoco se descarta subir su tasa a partir del 13% actual.
En su “Marco fiscal presupuestario de mediano plazo, 2014-2019”, la cartera del ministro Helio Fallas plantea que en el escenario de que el IVA entre en vigencia en el 2016, se logrará una mejora en la eficiencia tributaria equivalente a un 0,95% del PIB.
Con la medida, Hacienda espera paliar el déficit fiscal de un 6% del PIB para tranquilizar a las calificadoras de riesgo internacionales que reclaman por la inacción del Gobierno ante el crecimiento del faltante de recursos para cubrir sus gastos.
IVA visto por los empresarios
El efecto contrario a la tranquilidad en las calificadoras de riesgo lo vive ya el sector productivo.
La preocupación de los empresarios nace del efecto que podría causar el IVA en las costumbres de consumo de los ciudadanos y de las empresas, así como por las variantes en sus estructuras de costos particulares.
En la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep) reconocen la importancia de pasar al esquema del IVA ante una legislación llena de áreas grises como la actual.
Esa reconocida urgencia de renovar la vetusta Ley del Impuesto General de Ventas no exime a Hacienda de negociar con cada sector afectado antes del envío del proyecto al Congreso. Este diálogo sería vital para asegurar un trámite exitoso en Cuesta de Moras.
Un buen punto de referencia, según Uccaep, son los acuerdos que en torno al IVA dejó el gobierno anterior en su propuesta de Consolidación Fiscal. recuadro “Herencia ...”.
“Es un hecho que se requiere una negociación diferenciada por sector pues a muchos les cambió la situación económica desde las últimas conversaciones”, advirtió Alan Saborío, asesor en tributos de Uccaep.
La Asociación Bancaria Costarricense (ABC) comulga con la idea de dotar al país de un esquema tributario moderno, pero recuerda al Gobierno que no es usual gravar los servicios de intermediación financiera.
Pablo Heriberto Abarca, presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), dijo que los agremiados se inclinan por un IVA con una tasa escalonada que inicie en un 4% que crecería en un 2% hasta llegar al 13%, donde queden excluidas transacciones como la venta de vehículos propiedad de los rent-a-car.
El IVA caería bien al sector industrial. Eso sí, siempre que venga de la mano con una transformación del actual sistema de acreditación por incorporación en la producción de insumos, materiales, maquinaria y equipo, por uno de acreditación financiera en que el valor agregado se pueda acreditar.
“En aquellos casos en que se mantengan exoneraciones se debe establecer una tarifa preferencial para materias primas para que no se traslade la totalidad del 13% al costo del producto”, argumentó Enrique Egloff, presidente de la Cámara de Industrias.
La Cámara de la Construcción en tanto, tiene criterio favorable sobre la aplicación del IVA a los bienes, pero pide no gravar los servicios por el incremento en los costos de la construcción.
Hacienda, por lo tanto, queda obligada a no insistir en el IVA deseado por el Gobierno, sino, en el que es posible aprobar en el contexto actual.
Herencia Tributaria:
Renta Global: El gobierno de Laura Chinchilla heredó un plan de reforma al IVA que propone tasas preferenciales para los servicios de educación y salud privados.
Canasta básica: Tal como lo proponen varios sectores del empresariado, el proyecto heredado también crea tasas diferenciadas del IVA para la Canasta Básica Alimentaria.
Tarifa sube: Esas tarifas diferenciadas causarían el inconveniente de que obligarían a aumentar la tasa del IVA de forma escalonada hasta un 15%.
Mayor recaudación: Esas modificaciones permitirían que el Estado recaude adicionalmente por concepto del impuesto de valor agregado hasta un 1,55% del PIB.