La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) recomienda a Costa Rica reducir gradualmente sus contribuciones a la seguridad social y subir otros impuestos menos regresivos. También recomiendan recaudar las contribuciones a la seguridad social como porcentaje de los ingresos reales, para implantar un sistema más progresivo en el país.
Así se desprende de una de las sugerencias que integra la entidad internacional en su último informe de Análisis de políticas fiscales para Costa Rica, que alerta sobre la grave situación fiscal de Costa Rica. Este documento fue realizado por solicitud del Gobierno y sus recomendaciones no forman parte de las evaluaciones para el proceso de integración a la OCDE.
El organismo define que las contribuciones a la seguridad social son las que en este momento se otorgan a la Caja Costarricense del Seguro Social (seguro de salud y el aporte al régimen de pensiones).
Según la OCDE, en primera instancia el país debe de resolver el problema fiscal por medio de una urgente evaluación de sus gastos, una mejora recaudatoria y un aumento en la base tributaria. Posteriormente –una vez solucionado el déficit fiscal– una de las recomendaciones más importantes es reducir gradualmente ese aporte a las contribuciones de la seguridad social, y sustituirlas por otro tipo de impuestos más progresivos (es decir, graduales, de acuerdo con los ingresos de cada persona).
Para la entidad, las contribuciones a la seguridad social están gravando con fuerza el empleo formal, mientras que muy pocos costarricenses están sujetos al pago del impuesto sobre la renta de personas físicas. Eso reduce los incentivos al trabajo en el sector formal y la demanda de mano en ese sector. Ese panorama, entre otros detalles, explica el alto empleo informal en el país: cercano al 44,7% de los costarricenses.
Reducir las contribuciones a la seguridad social aumentaría los incentivos para que los empleadores contraten y declaren a sus trabajadores, sostienen. Sugieren, por ejemplo, permitir que las pequeñas empresas estén parcialmente exentas de las contribuciones sociales por cuatro años, para permitirles crecer y entrar en el terreno formal. De hecho, esta última propuesta ya fue traducida a un proyecto de ley que el Gobierno discute en este momento.
¿Cómo se podría sostener la seguridad del país ante esos cambios? La OCDE propone –más bien– recaudar las contribuciones a la seguridad social como porcentaje de los ingresos reales, lo que crearía un impuesto mucho más progresivo, acorde con las políticas de los países de la OCDE. También sostienen que se deberían aumentar impuestos sobre la renta a las empresas, impuestos al consumo o los impuestos sobre la propiedad, como sucede en Francia
Además, recomiendan que la Caja Costarricense de Seguro Social tenga una mayor coordinación con el Ministerio de Hacienda para el intercambio de información entre las dos entidades. Eso podría reducir la evasión, pues algunas empresas suelen subestimar sus costos laborales y los sobrevaloran al presentar sus declaraciones de impuestos.
"Es absolutamente necesario que el país implemente una reforma fiscal"
Para Bert Brys, economista de la Organización y uno de los autores del estudio, la crisis fiscal que experimentaría Costa Rica es inminente si no se aprueba una reforma fiscal.
"Su sistema de impuestos es muy ineficiente y no es nada justo. Han logrado un gran bienestar, pero para protegerlo tienen que enfocarse en las medidas de gastos. Su país también necesita subir el nivel de productividad. Son reformas cruciales para evitar una trampa. Además, su economía informal es enorme y necesitan incluir esos actores en la economía formal", señaló.
Brys también cree urgente tasar y verificar el cumplimiento en el pago de impuestos de sectores que actualmente tributan muy poco, como los servicios de tecnologías de información, de contabilidad y auditoría o de arquitectura e ingeniería.
"Costa Rica no puede seguir con este nivel de deuda, por el bajo nivel de impuestos que recoje. Hay una crisis que va a llegar en algún momento: eso es muy claro y no hay ninguna duda. El nivel de vida de su país ha subido muchísimo pero el sistema de impuestos no ha cambiado con ello. Mientras tanto, el país sigue inmóvil" cerró.