El proyecto para frenar el ingreso de los capitales externos, conocidos como "capitales golondrina", cuenta con los votos necesarios para su aprobación.
Según el Partido Liberación Nacional (PLN), basta con obtener el respaldo de la mitad más uno de los diputados para que el plan, impulsado desde enero del 2013 por el Poder Ejecutivo, alcance su aprobación.
Según el jefe de fracción liberacionista, Edgardo Araya, la propuesta cuenta con el respaldo de sus diputados y de la bancada del Partido Acción Ciudadana (PAC) lo cual garantiza la cantidad de votos necesaria.
Carmen Muñoz, jefa de esta última bancada, confirmó que su grupo está a favor de la propuesta de ley sugerida por el Banco Central de Costa Rica (BCCR) para desincentivar el ingreso de capitales especulativos, que son inversiones a corto plazo que desestabilizan el panorama macroeconómico del país.
De concretarse ese apoyo, la iniciativa de ley se votaría durante la última semana del mes en curso, pues tiene pendiente el trámite de tres de los cuatro días habilitados para que los diputados presenten mociones de reiteración.
La diputada Patricia Pérez, del Movimiento Libertario, es la parlamentaria que más mociones ha presentado para aclarar varios aspectos del proyecto, como cuáles inversiones se pueden considerar especulativas y que, por lo tanto, estarían sujetas a ser gravadas con una tasa adicional del impuesto sobre la renta.
Pero los cambios, de concretarse, tampoco tranquilizarían a la legisladora, quien considera que el proyecto impulsado por el Poder Ejecutivo perjudicaría la llegada al país de Inversión Extranjera Directa (IED) a largo plazo.
"Eso sería fatal en momentos en que la economía costarricense se desacelera por culpa de la equivocación del BCCR al ordenar un límite al crecimiento del crédito", advirtió la libertaria.
El legislador independiente Luis Fishman agregó que el proyecto podría resultar inconstitucional al darle la potestad al BCCR de imponer el tributo de renta a las inversiones por un plazo de hasta seis meses, cuando lo considere necesario.
Esta situación, según el congresista, causaría un vacío todavía mayor en caso de que la Sala Constitucional eventualmente lo objete.
Fishman agregó que la actual situación macroeconómica nacional y mundial hacen innecesario el plan, que encabeza la lista de propuestas convocadas por el Poder Ejecutivo para el actual periodo de sesiones extraordinarias.