El cansancio se nota en sus voces. Los dirigentes del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) quedaron desgastados tras una semana en la que el candidato a la presidencia, Rodolfo Hernández, renunció dos veces, siendo la definitiva este miércoles.
Empero, dicen encontrar consuelo en la madurez del partido y en las bases que este conserva fuertes en todo el país.
Rodolfo Piza, uno de los llamados a tomar las banderas que dejó de lado Hernández, sostuvo que, pese a todo, sólo tiene agradecimientos hacia el médico pediatra, director (con permiso sin goce de salario) del Hospital Nacional de Niños.
“Yo no sé si seré el candidato. Es un tema que me agarra en curva. Lo que sí le puedo decir es que en el partido hay muchos líderes muy capaces y que la Asamblea Nacional tratará de encontrar la fórmula presidencial que garantice mantener los objetivos”, contestó al consultársele si es él quien juntará la toalla que tiró Hernández.
De camino a la farmacia, donde se inyectaría contra el resfrío potenciado por el estrés de los últimos 7 días, Piza declaró que se mantiene optimista en cuanto al futuro electoral que le espera al PUSC.
“No será fácil recuperar la credibilidad; todos los líderes tendrán que hacer un esfuerzo para ganarse la confianza nuevamente, pero sigo pensando que los problemas del país y sus soluciones son las que deberían acaparar nuestros pensamientos”, afirmó el abogado.
Desde una trinchera aún más complicada, la de candidato a diputado, Rafael Ortiz reconoció que hoy es más complicado salir a las comunidades a pedir los votos para intentar pelear por una curul por la provincia de Alajuela.
“El PUSC, si bien ha cometido errores, es un partido que le ha dado mucho a Costa Rica y merece respeto. Sin duda desmotiva trabajar así, en medio de los golpes que ha sufrido su institucionalidad en los últimos días”, sostuvo.
El aspirante a diputado llamó a sus copartidarios a extraer del torbellino de la última semana una lección capital: “La Asamblea Nacional debe escoger como candidato a una persona que sepa manejar las tensiones y que sepa tratar los avatares de la política”.
“Ahora sólo queda actuar con mucha tranquilidad y serenidad; el trabajo que un grupo joven realizó durante cuatro años, fue echado por la borda”, dijo Ortiz, con cierto dejo de resignación y en referencia a la labor efectuada por el Comité Ejecutivo encabezado por Gerardo Vargas.
Piza, por su parte, comparó al PUSC con un ave fénix que se levanta de las cenizas, figura con la que alimenta su esperanza.
“Siento que en el PUSC hay más cosas positivas que problemas. Creo que el partido terminará unido alrededor de los valores comunes. Observé el renacimiento del PUSC y ahora no pierdo la fe en que renazca nuevamente”, concluyó.
Este sábado 12 de octubre la Asamblea Nacional de la divisa rojiazul se reunirá para elegir al nuevo candidato presidencial ante la dimisión definitiva de Rodolfo Hernández.