Las personas no videntes tendrán la posibilidad de votar sin asistencia en una segunda ronda presidencial en Costa Rica y así lo harán este 6 de abril en todas las juntas receptoras de votos del país.
Según el director de Programas Electorales del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Héctor Fernández, el objetivo es darle total independencia en el sufragio a las personas ciegas mediante la elaboración de 6.515 plantillas plásticas de lectura del braille.
El TSE ya ordenó confeccionarlas a la firma que ganó la licitación para elaborar las plantillas utilizadas en la primera ronda electoral, realizada el pasado 2 de febrero.
Para la primera ronda se fabricaron 13.000 plantillas, prácticamente el doble porque también eran dos papeletas: la de presidente y la de diputados.
La empresa encargada es la nacional Empaques y Envases Centroamericanos EMCA S.A., que pertenece al Grupo Vargas S.A. y que se especializa en la fabricación de empaques rígidos termo-formados en plástico.
Las plantillas son precisamente láminas de plástico que se colocan sobre la papeleta de papel y que tienen en braille el nombre de los dos partidos que se disputan la Presidencia de la República. Cuentan con el espacio libre en el sitio destinado para marcar con el crayón la escogencia que el votante realice.
Héctor Fernández explicó que en el contrato previsto con la empresa EMCA estaba contemplada la eventualidad de que hubiera segunda ronda y así ellos produjeran una plantilla que se adaptara a la papeleta de esa segunda vuelta.
"Hemos averiguado que un 10% del padrón corresponde a personas con algún tipo de discapacidad; quiere decir que dentro este porcentaje hay personas con discapacidad visual", señaló Fernández, quien explicó que la impresión de plantillas especiales se acordó con diferentes asociaciones que los representan.
El TSE contrató la producción de una plantilla para cada mesa receptora de votos, que será facilitada a la persona con discapacidad visual que lo requiera para que su voto sea totalmente independiente de cualquier asistencia personal.
Según la institución electoral, el costo de esta ampliación del contrato supera los ¢5,2 millones. Las plantillas estarán listas al mismo tiempo que las papeletas, para empacarlas y distribuirlas en los 81 cantones del país para los electores inscritos en el padrón electoral.
Asimismo, el órgano electoral pondrá a disposición productos de apoyo que facilitarán el sufragio a personas con discapacidad, como la guía para firmar, el cobertor de crayón, la plantilla antideslizante, la lupa y la mampara móvil.