El Banco Central anunció esta mañana que aplicará un tope de crecimiento a las carteras de crédito de todos los bancos del país del 9% entre febrero y octubre de este año.
Con esta medida, el Central pretende reducir la colocación de recursos en la economía y de paso controlar la inflación, tal y como lo había adelantado ayer EF.
La acción fue revelada durante una reunión con los miembros de la Asociación Bancaria Costarricense (ABC), un poco antes de dar a conocer a la prensa los resultados del Programa Macroeconómico 2013-2014.
Sin embargo, el mayor ajuste se aplicará en las carteras en dólares. El Central anunció que los bancos que hayan aumentado su cartera en moneda extranjera más de un 20% en el 2012, solo podrán colocar este año un 30% de ese crecimiento. Es decir, si un banco colocó $100 el año pasado, no podrá colocar más de $30 entre febrero y octubre próximos.
Ahora bien, si la entidad colocó menos de un 20%, solo podrá crecer un 6% en esa moneda, de tal forma que aumente un 8% durante todo el año.
De esa forma, se pretende que las entidades cambien su mezcla de colocación y giren más dinero en colones. Eso sí, en total (dólares y colones) las entidades no podrán crecer más de un 9% en estos nueve meses y un 12,2% de forma anualizada, según confirmó el gerente general del Banco de Costa Rica (BCR), Mario Rivera.
Estas medidas van en contra de las alegres proyecciones de incremento en los préstamos que habían anunciado los bancos a inicios del año.
Por ejemplo, el Banco Nacional estimaba crecer un 15% en colocaciones, el BCR un 12%, BAC San José un 14%, Banco Bansol un 50%, Banco Lafise un 25% y Banco Cathay un 25%.
Aunque ayer circuló fuertemente la versión de que el Central también estaba valorando aplicar una sobre tasa a las importaciones, esta opción se descartó.
La Asociación Bancaria Costarricense (ABC) rechazó el tope impuesto. "La medida afecta a las micro y pequeñas empresas, por cuanto tendrán menos crédito disponible y más caro”, argumentó Gilberto Serrano, presidente de la organización.
Serrano indicó que la acción afecta a las familias que pretenden comprar una vivienda por medio del crédito en el sistema financiero local.
"Sin lugar a dudas, la medida es contraria al esfuerzo nacional por crear nuevos empleos y producir más, dado que limita tanto a las familias como al sector productivo costarricense", agregó Serrano.
Para Gerardo Corrales, gerente del BAC San José, con esta decisión se trasladó el ajuste monetario a los bancos, que conllevará a un incremento de las tasas de interés. Agregó que "deja en libertad a los bancos de maletín quienes tendrá ahora mayor demanda y facilidades para colocar créditos en dólares en el país pues no están sujetos a ningún tipo de crédito o restricción"..
En su criterio, los perjudicados serán aquellos clientes que no tienen acceso a financiamiento del exterior, como las pymes y las personas físicas.
Rivera, por su parte, indicó que esta situación los obligará a reajustar sus expectativas de crecimiento del año y sus estrategias de colocación tanto de los recursos en dólares como en colones.
Indicó que los bancos ahora serán más estrictos para colocar en dólares, algo que puede afectar más al sector productivo, que se financia principalmente en esa moneda. Es de esperar, dijo, un incremento en las tasas de interés en dólares a nivel local.
En el caso de los colones, al haber mayor disputa por esa moneda en el mercado (dado que los bancos ahora podrán colocar más en colones) se podría generar una presión en las tasas de interés, pero que el Central les aseguró que hay liquidez suficiente para atender la demanda y mantener los rendimientos bajos.