El déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos (diferencia entre los ingresos y las salidas de divisas del país) cerró en $964 millones en el primer semestre del año, un 11% superior al que se registró en la primera mitad del 2012.
Este faltante fue impulsado principalmente por un déficit en la cuenta de bienes (diferencia entre exportaciones e importaciones de bienes) de $2.676 millones, un 16% más alto que el que se observó hace 12 meses.
Entre tanto, la cuenta de servicios cerró en $2.005 millones entre enero y junio, con un incremento del 14% respecto al año anterior.
El Banco Central había estimado, en enero, que el faltante de la cuenta corriente rondará el 4,9% del PIB en todo el año, es decir, cerca de $2.440 millones.
Precisamente, el Central actualizó esta tarde los datos de las cuentas nacionales para la primera mitad del 2013 y reveló las cifras del Producto Interno Bruto del segundo trimestre, que arrojó un crecimiento del 2,94% en términos reales.
Al hacer un desglose de la balanza de pagos, se observa que la cuenta de capitales (en la que se registra el ingreso y salida de divisas por efectos de financiamiento que recibe el país), alcanzó los $2.204 millones, impulsada principalmente por aumento en los recursos en títulos de deuda, cuenta donde se registran los recursos que recibió el país por la colocación de $1.000 millones en eurobonos en abril pasado.
Adicionalmente, la Inversión Extranjera Directa (IED) acumulada en el primer semestre alcanzó los $1.335 millones, un 15% superior a la de los primeros seis meses del 2012.
Sin embargo, al revisar la cifra por trimestres, se observa una desaceleración en la inversión. Mientras que entre enero y marzo, el país recibió $858 millones, entre abril y junio obtuvo $467 millones, un 46% menos.
Aun así, la cifra acumulada en el primer semestre en IED aun cubre por completo (y más) el déficit de la cuenta corriente. Lo anterior explica, en parte, la estabilidad en el mercado cambiario, pues el ingreso de divisas todavía es superior a las salidas.
Solo en el segundo trimestre, el faltante de la cuenta corriente fue de $519 millones, un 50% superior al del año pasado. Entre tanto, la cuenta de capital tuvo un superávit de $1.454 millones, más del doble de lo registrado el año pasado, nuevamente impulsado por la colocación de los eurobonos.
El Banco Central publicará los datos de las cuentas nacionales y de la balanza de pagos del tercer trimestre (y los acumulados entre enero y setiembre) hasta el 30 de diciembre próximo.