Diferencia entre tasas de préstamos y ahorros se ha reducido en los últimos 18 años y encaje mínimo legal obstaculiza más reducciones, dice la Asociación Bancaria

El promedio de las tasas activas de los bancos ha tenido una tendencia general a la baja en las últimas dos décadas, según los datos presentados por la ABC.

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El margen de intermediación financiera en colones ha seguido una tendencia a la baja en los últimos 18 años. Así lo expuso la Asociación Bancaria Costarricense (ABC) en una conferencia de prensa este martes 9 de abril.

Este margen es, en términos sencillos, la diferencia entre las tasas activas (lo que los bancos cobran por préstamos) y las tasas pasivas (lo que los bancos le pagan a sus clientes por depósitos).

“Esta tendencia hacia la reducción en el margen en colones ha sido sostenida desde el 2005, y ha impactado positivamente a los clientes bancarios por la disminución de las tasas activas que pagan por sus créditos”, comentó Daniela Gutiérrez, economista de la ABC, durante la conferencia.

Según los datos expuestos por la ABC, el margen en moneda nacional del sistema bancario costarricense ha pasado de 13,5 puntos porcentuales (p.p.) en 2005 a 5,1 p.p. en 2023; una reducción de 8,4 p.p.

Estos datos incluyen la operación de los 14 bancos comerciales tanto públicos como privados.

Gutiérrez explicó que la disminución del margen se ha dado mayoritariamente por la caída de la tasa activa, la cual pasó de promediarse en 22,8% para 2005 a 10,5% en 2023.

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Gutiérrez también enumeró tres motivos claves para la reducción:

  • La mejora la eficiencia del negocio de la intermediación al reducirse los costos por cada colón intermediado por medio de un proceso de transformación tecnológica.
  • La mejora por parte de las entidades del manejo de los riesgos, que disminuye los costos por préstamos no pagados.
  • La mejora en la competencia, pues el sector tiene más intermediarios y está menos concentrado en pocas entidades.

Ronulfo Jiménez, economista asesor de la ABC, mencionó que la mejora en la inflación que ha vivido el país en las últimas décadas también ha favorecido a una reducción en las tasas activas. Sin embargo, considera que el nivel del encaje mínimo legal ha puesto un freno sobre cuánto pueden bajar.

“Lo que no ha ayudado en este proceso es la parte de encajes. Los encajes en Costa Rica siguen siendo altos, hay países donde no hay encajes o son de 1%; Costa Rica tiene un encaje de 15%, lo cual contribuye a ampliar ese margen de intermediación financiera. Es parte de los retos que tiene el país de reforma para continuar este proceso que hace más eficiente el sistema financiero”, mencionó Jiménez.

El encaje es una reserva de dinero (un 15% de los pasivos) que los intermediarios financieros deben mantener en el Banco Central de Costa Rica en forma de depósitos en cuenta corriente. Por dichos recursos el intermediario no recibe intereses.

Melvin Garita, subgerente del Banco Nacional de Costa Rica, agrega como otra de las razones de la caída en el margen el aumento en los ingresos por servicios no tradicionales, como el cobro de comisiones por servicios, así como el mejoramiento de las estimaciones de impago de los clientes.

“Este (último) es un factor que permite realizar una mejor individualización de los riesgos, haciendo más eficiente el manejo de las provisiones y la mora en general, que son costos que todo banco tiene que enfrentar”, explica Garita.

Cabe destacar que el margen de intermediación financiera no es lo mismo que las utilidades, ya que de dicho margen los bancos deben cubrir los costos de operación de captar y prestar recursos, impuestos y cargas parafiscales, además de las reservas para enfrentar el deterioro de cartera de crédito e inversiones. Del restante es de donde salen las utilidades.