Washington. Durante su reunión de enero, los funcionarios de la Reserva Federal de Estados Unidos creían que un panorama económico alentador y los efectos de los recientemente aprobados recortes fiscales habían elevado las perspectivas de un crecimiento sólido y de nuevos aumentos de las tasas de interés, de acuerdo con las minutas del encuentro dadas a conocer el miércoles.
Las minutas de la reunión de la Fed, el 30 y 31 de enero, indican que los funcionarios estaban más optimistas en cuanto a la economía de lo que habían estado en diciembre.
Apuntaron que la economía, tanto de Estados Unidos como a nivel internacional era más fuerte, así como las expectativas de que los recortes fiscales promulgados en diciembre por los republicanos impulsarían el crecimiento.
“La mayoría de los participantes informaron que un panorama más sólido sobre el crecimiento económico aumenta la probabilidad de se establezca gradualmente una política de mayor reafirmación” , según las minutas.
Las tasas de la Fed se mantuvieron en la reunión de enero, la cual fue la última que presidió Janet Yellen antes de que su mandato terminara este mes y fuera sucedida por Jerome Powell.
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La reunión del mes pasado ocurrió antes del desplome bursátil a principios de febrero y antes del acuerdo en el Congreso del presupuesto que impulsará el gasto a los programas militares y domésticos al destinar $300.000 millones adicionales en dos años.
Algunos economistas han indicado que la turbulencia en el mercado y la perspectiva de una deuda federal más alta y mayores rendimientos de los bonos, podrían provocar que la Fed fuera más cautelosa en cuanto a aumentar las tasas a corto plazo.
Sin embargo, otros creen que el banco central descontará esos eventos y se enfocará en los efectos estimulantes de los recortes fiscales de $1,5 billones y del gasto adicional del acuerdo presupuestario.
La posibilidad de una mayor inflación como resultado de recortes fiscales y los aumentos del gasto podría hacer que sea más probable que la Fed restrinja el crédito.
La Fed subió las tasas en tres ocasiones durante 2017 e indicó en su reunión de diciembre que esperaba hacerlo unas tres veces más en 2018.
Sin embargo, muchos analistas creen ahora que la Fed podría acelerar sus incrementos a las tasas y aumentarlas cuatro ocasiones en este año. Eso podría ocasionar que las tasas para los consumidores, como las hipotecarias, suban con mayor rapidez.
La tasa de referencia de la Fed se mantiene baja todavía, entre 1,25% y 1,5%.
Por su parte, la bolsa se cerró este martes 21 de febrero a la baja debilitada por los comentarios de la Fed.
El índice industrial Dow Jones bajó 0,67% a 24.797,78 unidades, el Nasdaq, de valores tecnológicos, cedió 0,22% a 7.218,23 y el S&P 500 retrocedió 0,55% a 2.701,33 unidades.
Los tres índices estaban en alza antes de que la Fed revelara las actas de su reunión de política de enero. Ese documento dio a entender que gracias a la reforma fiscal, Estados Unidos podrá crecer más de lo previsto y, en consecuencia, habría espacio para aumentar más rápido de lo previsto las tasas de interés.
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Esos comentarios “no son novedosos pero son una confirmación”, dijo Art Hogan de Wunderlich Securities para quien ese informe sienta las bases para un incremento en marzo. “Y esa confirmación influye en el mercado de la deuda”, añadió.
Hacia las 9:20 p.m. los bonos del Tesoro a 10 años aumentaban su rendimiento a 2,937% contra 2,890% del martes y el de los bonos a 30 años subía a 3,216% contra 3,153% de la pasada jornada.
Tras la caída de los índices a comienzos de mes y su rápida recuperación “estamos aún en una fase turbulencias, de ajustes técnicos”, dijo Hogan. “Esa volatilidad será la norma y no la excepción”, estimó.