Fitch asigna perspectiva positiva a sector bancario costarricense

Calificadora pronostica que el crecimiento de los préstamos en el país mantenga una tendencia positiva durante los últimos meses del año.

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La calificadora de riesgo, Fitch Ratings Centroamérica, asignó perspectivas positivas a los sistemas bancarios de Uruguay y Costa Rica, debido a los efectos positivos del entorno económico favorable de 2014 sobre sus entidades financieras.

Los factores claves para Costa Rica, señalados por la calificadora, y que vislumbran un entorno positivo para el sector financiero nacional, se liga a que la devaluación del colón sobrepasó las expectativas de la agencia, lo que aumentó las ganancias cambiarias durante el primer trimestre de 2014, y mejoraron las utilidades netas del sistema.

"A marzo de 2014, el colón de Costa Rica se devaluó en 8,4%, comparado con el mismo período del año anterior. Esta devaluación aumentó las utilidades en ¢34.119 millones, reportados en su mayoría por los bancos privados", se lee en el documento.

Agrega que es probable que las ganancias cambiarias disminuyan durante los próximos meses, dado que el tipo de cambio se ha estabilizado desde mediados de junio, por lo que se debería diluir su impacto sobre los resultados para el año completo.

Además, Fitch señala un mayor crecimiento en el otorgamiento de préstamos en el primer trimestre de 2014, y pronostica que el crecimiento de los préstamos mantenga una tendencia positiva en 2014 y supere el crecimiento de 10% proyectado por Fitch.

Sin embargo, la calificadora fue enfática en que la perspectiva positiva de sector nacional es sensible a los cambios negativos inesperados en el entorno operativo, como podría ser una baja importante en el crecimiento del PIB, la cual haría peligrar la capacidad de pago del deudor.

"En este escenario, el desempeño de los bancos se afectaría y la perspectiva del sector cambiaría a estable. Asimismo, una debilidad renovada del colón podría representar un desafío para la capacidad de crecimiento del sistema bancario, dado que podría reducir los índices de suficiencia de capital. Esta tendencia podría compensarse, en parte, por un nivel de utilidades mayor", señala.

Para países como Argentina, Brasil, Ecuador y Venezuela, la calificadora mantuvo perspectivas negativas para el sector bancario.

Una preocupación de la agencia por sus economías débiles e intervención gubernamental creciente, "que podrían dificultar la expansión crediticia real y las operaciones bancarias", fueron la razón para calificar el panorama de los bancos de esas naciones.