Grupos financieros de Costa Rica mantendrán invariables sus metas de crecimiento este año

Ni el tope credicitio ni la fría actividad económica han incidido en los objetivos de los conglomerados

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

El tope al crecimiento del crédito, que encendió la alarma cuando se anunció en enero, no parece haber modificado las expectativas y metas de crecimiento de los grupos financieros locales.

Sí, harán ajustes en la estrategia y en la mezcla de ingresos, pero la meta es la misma: crecer.

Crecer tal y como lo hicieron el año pasado, cuando las utilidades netas de los 18 conglomerados que reportan a la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) crecieron un 20% real, según se desprende del último ranking de grupos elaborado por EF, con datos al cierre de diciembre del 2012.

Sin embargo, el tope crediticio les obliga a reforzar otras fuentes de ingreso, una estrategia que llevan años desarrollando pero que todavía es un tarea pendiente en corporaciones enfocadas, mayoritariamente, al negocio de prestar dinero.

Diversificar será importante este año debido a que la colocación de crédito se desacelera por una reacción conjunta del acatamiento del tope y el enfriamiento que la actividad económica se experimenta desde febrero del 2012.

La tasa de crecimiento interanual del crédito bajó de casi 13% en diciembre del año pasado a 9,63% a finales de marzo, una merma de 3 puntos porcentuales.

Por su parte, el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) pasó de crecer a ritmos interanuales de 7% en febrero del año anterior a estancarse en crecimientos cercanos al 3,5% durante los últimos cinco meses.

Junto a estos retos, los conglomerados deben lidiar con la merma en la Tasa Básica Pasiva (TBP) que pasó de rondar el 11% en octubre del 2012 a 6,70% la semana anterior.

La TBP se usa como componente variable de los intereses que los bancos cobran por financiamiento, y con su caída arrastra sus ingresos.

“No ha sido necesario modificar metas. Desde un inicio estaban bastante alineadas con las previsiones del Banco Central. Vemos nuestra cartera de crédito creciendo un 13% durante todo el periodo 2013”, aseguró Bernardo Alfaro, subgerente de general de crédito y finanzas del Banco Nacional de Costa Rica, el principal grupo financiero por activos y utilidades en el 2012.

De acuerdo con el ranking , las corporaciones lograron buenos resultados, por una buena colocación de préstamos, una caída de la morosidad, una estrategia de captación más barata, el control del gasto administrativo y el empuje de los ingresos por servicios.

Eso mejoró sus índices de rentabilidad y eficiencia.

Más servicios

Para compensar el menor apetito por crédito este año, los grupos tenderán a explotar las actividades de sus subsidiarias dedicadas a la venta de servicios.

Los ingresos por servicios experimentaron un crecimiento de 6,7% real a diciembre del 2012 en comparación con el mismo mes del 2011. En ese mismo periodo, las carteras de crédito de las corporaciones se “engordaron” en un 8,5%.

La brecha en el crecimiento de estos motores de los conglomerados se redujo con respecto a la registrada a mediados del año pasado cuando la cartera de crédito crecía un 9% y los ingresos por servicios un 6%.

“El enfoque en ampliar la oferta de servicios, así como para mejorar la experiencia del cliente es continuo, y eso se ve reflejado en la mejora de los ingresos. Esto es parte de nuestra estrategia de largo plazo, independientemente del tope al crecimiento del crédito”, comentó Carlos Brina, subgerente general de Scotiabank.

Este grupo financiero registró un incremento del 10% en sus ingresos por servicios, el segundo mejor entre los bancos privados, gracias a la mejora en el dinero percibido por servicios de cash management , compra y venta de divisa, y las comisiones generadas por el puesto de bolsa, la sociedad de fondos de inversión y la nueva corredora de seguros.

Entre los bancos públicos fue el Nacional el que lideró el crecimiento en los ingresos por servicios con 8,9%.

Entre los privados, Cathay registró el mayor crecimiento con un 61,1%, aunque BAC San José tiene el mayor ingreso nominal con más de ¢93.000 millones.

A buen ritmo

Pese a que la actividad económica inició su proceso de enfriamiento a principios del año pasado, los grupos financieros se anotaron buenos resultados.

Las utilidades crecieron 20%, cuatro veces más que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), estimado en un 5,1% para 2012 por el Banco Central de Costa Rica (BCCR) en su Programa Macroeconómico 2013-2014.

El Banco Nacional registró el mayor crecimiento en las utilidades, con un 66%. Además, sus ganancias son las más abultadas entre los conglomerados, pues ascendieron a ¢43.700 millones.

Por su parte, el rebote de Cathay, de una pérdida en el 2011 a una ganancia de ¢621 millones, colocó a este corporación en el primer escalafón del ranking en términos porcentuales.

“Nuestras proyecciones para este año son de alcanzar una utilidad de aproximadamente $1,3 millones lo cual es muy similar a la utilidad del año anterior. Estamos trabajando en mecanismos que nos permitan lograr los resultados sin vernos afectados por la restricción de crédito establecida por el BCCR”, comentó Marco Chaves, gerente financiero de Banco Cathay.

Lafise también está entre los que registraron un crecimiento vigoroso de sus utilidades (83%), el cual atribuyen a la participación más fuerte en segmentos de mercado como descuento de facturas, garantías de participación y cumplimiento, y créditos personales, explicó Jonathan Valembois Torres, gerente de administración y finanzas del banco.

En conjunto, los grupos públicos registraron utilidades superiores a los ¢122.000 millones.

Control estricto

Junto al crecimiento de los ingresos por servicios y el incremento en la cartera de crédito, los conglomerados se beneficiaron el año pasado de un decrecimiento en las estimaciones que deben reservar ante el deterioro de algunas operaciones crediticias.

El monto de esas reservas se redujo un 3,5%.

Los créditos en cobro judicial disminuyeron con más fuerza al pasar de ¢ 177.000 millones en el 2011 a ¢160.900 en el 2012 (9,3%).

Las mejoras en la calidad de la cartera de crédito permitió que también descendiera ligeramente la morosidad (medida como los créditos en cobro judicial entre la cartera total) del 1,7% a 1,4% el año pasado.

Para ajustar más la gestión de riesgo que desarrollan las entidades financieras en la colocación de créditos, el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) espera aprobar reformas al esquema de supervisión.

Entre las novedades estarían modificar la información de cada deudor incluida en el Centro de Información Crediticia para que incluya datos de endeudamiento según moneda, y si la tasas de interés es fija o variable.

Por otra parte, los bancos decidieron predicar con el ejemplo y no solo se pusieron estrictos con los clientes a los que financian, también apretaron las tuercas de sus operaciones.

El gasto administrativo creció solo un 3,7% real. El crecimiento de este rubro fue mayor entre la banca pública (5,3%) que entre los bancos privados (0,1%).

El peso de estas erogaciones sobre los ingresos de los grupos, un indicador de eficiencia, se redujo en una casi un punto porcentual.

Fondeo barato

En el frente de la obtención de fondos los grupos financieros también recortaron costos para registrar buenos resultados.

Los pasivos de los conglomerados crecieron 9,6% entre diciembre del 2011 y el mismo mes del 2012, sin embargo, sus obligaciones con el público solo crecieron 3,7%.

Esto apunta a que los grupos optaron por buscar fuentes internacionales de fondeo, más baratas, como los préstamos con bancos que operan en mercados con tasas de interés menores a las que rigen localmente.

Entre febrero del 2012 y el mismo mes de este año, las obligaciones de los bancos públicos con entidades financieras del exterior crecieron 69%.

Estas obligaciones para la industria bancaria en general crecieron 37%.

“Se logró un crecimiento del 174% en el fondeo proveniente de entidades financieras. Esto fue posible por la confianza que el banco ha logrado generar en la comunidad financiera nacional e internacional. Este fondeo de mayor plazo y mejor costo, nos permite a su vez seguir apoyando el aparato productivo nacional”, comentó Chaves, de Cathay.

El horizonte no está exento de riesgos para los conglomerados financieros locales, pero la inmobilidad de las metas refleja la confianza en la capacidad de sortearlos.