El precio de la gasolina súper alcanzó, al final de octubre pasado, el mayor nivel real desde hace cuatro años. En tanto, la gasolina regular ya había arrojado precios más elevados más recientemente.
Por medio de un índice elaborado por EF, se determina el precio real de los principales combustiles utilizados por los consumidores. Este se calcula al final de cada mes utilizando el valor de venta y el Índice de Precios al Consumidor (IPC), con una base 100 ubicada en enero del 2004. El resultado permite comparar los precios incorporando el efecto de la inflación.
La gasolina súper al consumidor tuvo un indicador en octubre de 137,88 puntos, cifra que no había sido superada desde octubre del 2008, cuando en ese entonces llegó a 152,29. Precisamente un mes después, en noviembre de ese año, los precios de los derivados del petróleo bajaron y se vivía la salida de una crisis que llevó el precio del petróleo a cerca de $140 por barril.
El 2008 fue el año que tuvo los precios más elevados de los combustibles. Ni los incrementos ocurridos a mitad del 2011, ni los actuales han igualado los niveles de ese entonces. Los precios reales más altos registrados ocurrieron entre junio y setiembre del 2008.
Lo que sí ha mostrado un comportamiento ligeramente diferente es el precio de la gasolina regular, cuyo valor real de octubre no ha sido el más alto de este año y más bien fue en el 2011 cuando el precio estuvo relativamente más alto. Al finalizar el mes pasado, este combustible alcanzó un índice de 137,36 puntos, mientras que en abril fue de 137,43. En junio del 2011 el indicador fue superior, con 140,40 puntos.
En junio del año pasado, el valor por litro de la gasolina regular era de ¢726. Si ese precio es traido a valor presente utilizando el IPC sería de ¢765, que claramente por encima del precio actual que es de ¢748.
Algo similar ocurre con el diesel, que aunque presenta un nivel elevado en comparación con el pasado, sigue siendo inferior al presentado en otros meses de este año y el pasado.
Aumentos de dos dígitos
En lo que va del año y en una comparación interanual (últimos doce meses), las gasolinas marcan aumentos porcentuales de dos dígitos.
En el caso de la súper, el aumento de enero a diciembre es de 16% y en el interanual es de 13%. Para la regular esos porcentajes son de 14% y 12% respectivamente.
El diesel es el que ha tenido incrementos más benevolentes con el bolsillo de los consumidores. De enero a octubre, el incremento ha sido de 3,8% y en 12 meses fue de 7% en el índice.
Los porcentajes anualizados demuestran que los tres combustibles tienen un comportamiento de incremento mayor al de la inflación anualizada (4,68%), medida por el IPC desde noviembre del 2011 a la fecha.
La variación al alza registrada más recientemente se debe principalmente a los incrementos aplicados en setiembre y octubre. Solo para la gasolina súper en esos dos meses el alza acumualda ha sido de ¢63 por litro.